Alemania privilegia a los vacunados
Solo los ciudadanos inmunizados ya no deben acatar el toque de queda ni limitar los contactos
Acceder a una cita en una peluquería sin tener que presentar un test negativo; salir a la calle más tarde de medianoche sin un salvoconducto o sin sufrir una emergencia para justificar ante la policía haber roto el toque de queda; encontrarse en un espacio privado con familiares o amigos sin contar para el límite de personas; volver de una región extranjera considerada de riesgo sin guardar cuarentena...
Todo esto es posible en Alemania desde el domingo, pero solo para dos perfiles de personas: aquellas que puedan demostrar que están completamente vacunadas o que se han recuperado de una infección con covid. Así lo decidió el pasado viernes el Bundesrat –Cámara territorial del Parlamento federal– tras dar luz verde a un decreto aprobado previamente por la vía rápida por el Bundestag –Cámara baja–.
La medida, no exenta de polémica, recibió el apoyo de todos los partidos de arco parlamentario federal a excepción de los liberalconservadores del FDP –que se abstuvieron– y de la ultraderecha
Una joven recibe la vacuna del covid-19 en Colonia. de Alternativa para Alemania (AfD), que votó en contra. El FDP pidió, sin éxito, incluir en el grupo de personas beneficiadas por la medida a aquellos ciudadanos que simplemente presenten un test negativo.
Fase crítica
Para volver a disfrutar de dichas libertades, las personas vacunadas completamente tendrán que esperar
14 días desde la inmunización total; las que se recuperaron de la enfermedad deberán demostrar que han pasado al menos 28 días y no más de seis meses desde el último PCR negativo. Se establece así un límite temporal para estos «derechos especiales» que el Gobierno federal y las autoridades defienden como un marco legal excepcional, pero necesario para ir recuperando poco a poco los derechos fundamentales recortados por la pandemia.
«Estamos en una fase crítica de la pandemia, en la que se podría poner fácilmente en peligro la cohesión social», dijo en el Bunderat Armin Laschet, primer ministro del estado federado Renania del Norte-Westfalia, presidente de la CDU y candidato democristiano a la cancillería. Laschet se refería a los agravios comparativos que pueden surgir y a la frágil base constitucional sobre la que se han aprobado los «derechos especiales» para una parte aún minoritaria de la sociedad alemana.
Según el Instituto RobertKoch (RKI), solo algo más del 8% de la población –siete millones– está completamente inmunizada, y el 30,6% –25,5 millones– lo está parcialmente tras haber recibido la primera dosis. La cifra de personas que oficialmente se ha recuperado de la enfermedad desde el inicio de la pandemia es de poco más de 3 millones.
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