El hospital de Ifeba, desmantelado
Preparado para acoger enfermos no críticos de covid, nunca se llegó a abrir
Cierra el hospital que nunca llegó a abrirse. Se cumplió el optimista presagio de que ojalá no tuviese que utilizarse nunca. Ya está siendo desmontado el hospital provisional habilitado por la Junta de Extremadura en las instalaciones de la Institución Ferial de Badajoz (Ifeba) en previsión de que las camas disponibles en el área de salud o incluso de la región, no fuesen suficientes para atender a los enfermos de covid, cuando se produjo la incidencia más preocupante de la pandemia en Extremadura. No ha llegado a usarse.
El hospital de Ifeba fue un ejemplo de coordinación entre administraciones en un momento de extrema gravedad por la situación sanitaria. Se habilitó en tan solo once días. El 20 de enero se anunció la decisión y el 1 de febrero ya estaba listo y preparado para acoger a enfermos de covid. Los trabajos para que estas instalaciones dejen de ser un hospital empezaron el viernes, 7 de mayo, y está previsto que finalicen el día 20, según informó a este diario el Servicio Extremeño de Salud (SES), que está acometiendo el desmontaje junto con el Ayuntamiento de Badajoz. De momento, durante el fin de semana, se ha retirado mobiliario, además de los equipos electromédicos, los ordenadores y el material de los almacenes. Posteriormente, se procederá al desmontaje de las distintas instalacon ciones: eléctricas, informáticas, fontanería, equipamiento contra incendios, de gases, al igual que el depósito de gases, las casetas prefabricadas de duchas, los paneles de separación y el suelo, que se colocó expresamente para esta instalación sanitaria.
El ayuntamiento cedió las instalaciones y los trabajadores de Ifeba estuvieron al pie del cañón los técnicos y empresas contratadas por el SES para convertir un espacio dedicado a la celebración de ferias en un centro sanitario con todos los recursos necesarios para que pudieran ser tratados pacientes no críticos. El Ejército aportó buena parte del mobiliario. Se ocupó el pabellón A al completo y buena parte del B (donde está el autocovid para las pruebas PCR). Además, se reservó un espacio para una unidad de semicríticos, que no ha llegado a instalarse. El hospital provisional se preparó para 148 camas en otros tantos boxes de 15 metros cuadrados fabricados por Ifeba con material totalmente nuevo. En un tiempo récord se instalaron 6.000 metros cuadrados de suelo vinílico, especial para facilitar la limpieza. Previamente, debajo se colocó todo el cableado. También se habilitaron baños prefabricados con duchas. El hospital ha estado listo para ser ocupado con 37 boxes dotados con todo lo necesario para los enfermos: oxigenoterapia, llamador para enfermería, puntos de luz para conectar bombas, taquilla, silla y biombo, como los de cualquier hospital, salvo que los pasillos no eran los de un edificio cerrado, sino abiertos en pabellones con mucha luz. Contaba con cinco controles de enfermería, uno plenamente montado. Las camas las aportó el Ejército desde el cuartel de Bótoa y se adecuaron las patas para que tuviesen más altura. Los colchones se compraron nuevos. Para el personal sanitario se habilitó una sala de espera, vestuarios, taquillas y dormitorios en la planta superior. Además de espacios para la lencería y almacenes de farmacia con frigoríficos.
Los trabajos de desmontaje van a coincidir con reanudación del calendario de ferias en Ifeba tras el paréntesis obligado por la crisis sanitaria. Se trata de la XIV Feria de la Belleza, Moda y Cosmética, que tendrá lugar entre los días 15 y 17 de mayo. A diferencia de ediciones anteriores, está dirigida exclusivamente a profesionales de estos sectores y se prevé la participación de unos 700 asistentes.
El próximo fin de semana se retoma el calendario de ferias con la dedicada a la moda y la belleza