«Respeto» por la denuncia a los tres ediles vacunados
La portavoz de la Junta, Isabel Gil Rosiña, mostró ayer «el máximo respeto y colaboración» del Ejecutivo extremeño tras la decisión de la Fiscalía de trasladar a los juzgados la denuncia de Unidas Podemos contra dos alcaldes y un concejal socialistas que se saltaron el protocolo de vacunación contra el covid19 el pasado mes de enero.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno y a preguntas de los medios, Rosiña avanzó además que la vicepresidenta primera y consejera de Administración Pública, Pilar Blanco-Morales, anunciará este jueves en el pleno de la Asamblea las medidas que la Junta tomará al respecto. Blanco-Morales se pronunciará en respuesta a una pregunta de Unidas por Extremadura.
Blanco-Morales informará en el pleno de las medidas que tomará el Ejecutivo
«Máximo respeto a la justicia y máxima colaboración cuando somos nosotros los que tenemos que dar cuenta a la justicia como Ejecutivo regional», señaló la portavoz tras la decisión de la Fiscalía de trasladar a los juzgados la denuncia de Unidas Podemos contra el alcalde de Valverde del Fresno, Amalio Robledo (recibió la primera dosis con 26 años y lo justificó alegando que era el director de los pisos tutelados); la alcaldesa de Higuera de la Serena, María Triviño, y el concejal de Olivenza Ramón Jiménez Saavedra, por entender que vulneraron de forma «evidente» el protocolo de vacunación y que su actitud podría ser incluso constitutiva de delito.
Rosiña quiso además hacer un reconocimiento al «sufrimiento» de la edil placentina Soraya Cobos, cuyo caso ha sido archivado y «nadie le va a devolver el daño que se le hizo».