Biden, sin estrategia
La escalada entre Israel y Hamás le estalla al dirigente sin un plan para la región, que no era una prioridad de su política exterior
El conflicto entre israelís y palestinos no estaba entre las prioridades de Joe Biden en política exterior. Desde que aterrizara en la Casa Blanca, el demócrata ha demostrado no tener ninguna prisa en gastar parte de su capital político en tratar de restaurar el papel de Estados Unidos como mediador en el conflicto o revertir las políticas proisraelís con las que Donald Trump quiso alterar los parámetros de su solución política. El problema de esa actitud de manos libres es que apuesta implícitamente por la estabilidad en una región donde la estabilidad siempre es pasajera. Su Administración ha pedido «calma», «contención» y el cese de la violencia, pero sus llamamientos están sido ignorados.
Las limitaciones estadounidenses las reconoció el lunes un portavoz del Departamento de Estado. «Dadas las circunstancias actuales sobre el terreno, incluso antes de este último estallido, no estamos en posición de ver progresos significativos», dijo Ned Price. Su país ha perdido influencia y está muy debilitado diplomáticamente.
Sin embajador en Israel Cuatro meses después de llegar al poder, Biden aún no ha nombrado a su embajador en Israel ni ha reabierto el consulado en Jerusalén Este que se encargaba de lidiar con los palestinos. Tampoco ha designado un enviado especial para tratar de reactivar el proceso de paz. Y aunque desde el Departamento de Estado se busca una postura equilibrada a la hora de condenar la violencia y las provocaciones israelís en Jerusalén que la desencadenaron, la Casa Blanca ha bloqueado por el momento una respuesta del Consejo de Seguridad de la ONU. Esgrime que podría dañar los esfuerzos soterrados de la diplomacia para tratar de frenar la escalada, aunque a nadie se le escapa que se trata de prevenir también una resolución que ponga el peso de la culpa en el bando israelí.
Y, entre tanto, el presidente ha decidido enviar a la región al subsecretario adjunto de Asuntos Palestinos e Israelís, Hady Amr, para buscar una «desescalada» sobre el terreno.