Un premio a la tauromaquia
La Junta de Extremadura impulsa la creación de unos galardones autonómicos que reconocerán a personas e instituciones en la difusión y defensa de esta cultura También se pondrá en marcha la Red de Municipios Taurinos
La Junta de Extremadura va a impulsar la creación de unos premios autonómicos que cada año reconocerán a personas e instituciones en la difusión y defensa de la cultura taurina. Además, se pondrá en marcha la Red de Municipios Taurinos de Extremadura con un doble objetivo: poner en valor el «rico patrimonio cultural» que subyace en los pueblos «de honda tradición taurina» y fomentar la participación de los vecinos, «especialmente los más jóvenes», en peñas y eventos taurinos.
Ambas propuestas se recogen en un nuevo decreto que está elaborando la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio. El texto, que acaba de cerrar el trámite de consulta pública y presentación de sugerencias, se puede consultar en el Portal de Transparencia de la Junta. Según se explica, es uno de los primeros frutos del protocolo que el pasado mes de octubre firmaron el Ejecutivo autonómico, las dos diputaciones provinciales y la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex) con la Fundación del Toro de Lidia para la promoción de esta fiesta.
La propia consejería reconoce en el texto que algunos movimientos sociales manifiestan su rechazo a la tauromaquia por el trato que reciben los animales durante los festejos, pero también apunta que «debe admitirse que actualmente existe un consenso en la aceptación mayoritaria
del carácter cultural, histórico y tradicional de la tauromaquia como parte esencial del patrimonio histórico, artístico, cultural y etnográfico español». «Como tal, es responsabilidad de los poderes públicos asegurar la libertad del creador y el desarrollo de cualquier expresión artística, en este caso la tauromaquia», justifica.
Impacto económico
El objetivo es mantener y promover la afición popular y renovarla en las nuevas generaciones, no solo por su vertiente cultural y artística, sino porque la tauromaquia es, según el Ejecutivo, «un sector
económico de primera magnitud» en Extremadura: en la dehesa pastan más de 120 ganaderías de reses bravas que ayudan a fijar población al territorio y cada año se celebran unos 600 festejos taurinos, con picos que han llegado hasta los casi 900 en algunas temporadas. Asimismo, Extremadura cuenta con una escuela de toreros reconocida internacionalmente y 48 plazas permanentes, «algunas de ellas auténticas joyas arquitectónicas e históricas» que en algunos casos datan del siglo XIX.
Las acciones de promoción se justifican en que actualmente la situación del sector en España «no es la más propicia»: quedó seriamente dañado por la crisis financiera de 2008, de la que no había sido capaz de recuperarse cuando ha recibido el envite del covid. Así, desde 2020 el sector está sumergido en una situación «realmente complicada» que no obstante, le ha servido para unirse y reclamar con voz unánime un apoyo más decidido por parte de las administraciones públicas a los festejos taurinos.
Con respecto a los galardones, se denominarán Premios Extremadura de la Tauromaquia y se concederán anualmente (un máximo de cuatro) a personas e instituciones que se distingan por la defensa y promoción de la tauromaquia. El borrador del decreto especifica en varias ocasiones que el premio consiste únicamente en una mención honorífica sin dotación económica, aunque sí se entregarán en un acto público «al que se dotará de la trascendencia, solemnidad y publicidad adecuadas», y que se financiará con las partidas habituales que la Junta ya destina al sector del toro (unos 80.000 euros anuales).
Por su parte, la Red de Municipios Taurinos pretende ser un «frente común» para promover y proteger la cultura taurina en todas sus facetas en el ámbito territorial extremeño. Se podrán adherir todas las localidades que lo soliciten tras su aprobación en el pleno municipal. Su objetivo es poner en valor el patrimonio taurino y promover la participación de los vecinos, «sobre todo los más jóvenes», en festejos, grupos o peñas taurinas.
En la dehesa extremeña pastan 120 ganaderías de reses bravas y cada año hay 600 festejos