Rayco, el delantero que llegó del calor
El punta canario del Diocesano, que ha marcado en dos de los tres últimos partidos, asegura que tras imponerse al filial del Atlético la plantilla confía más que nunca en la posibilidad de salvar la categoría
«Lo que más me ha costado ha sido acostumbrarme al frío». Al otro lado del teléfono, Rayco Pérez González (Arrecife, 2 de marzo de 2002) suena tímido. Sus respuestas son breves, pero intenta que sean certeras. Al igual que sus ocasiones con el Diocesano, a donde llegó el pasado verano, pero donde podía haber recalado unos meses antes, pues el conjunto colegial ya intentó ficharlo en el mercado de invierno de 2022.
Es delantero centro, vive del gol y por eso sabe que los tres que ha marcado hasta ahora no son la mejor carta de presentación, pero haber conseguido dos de ellos en las tres últimas jornadas hace que su confianza vuelva a estar por las nubes. «Es un alivio», apunta en otra de esas respuestas breves. Cortita y al pie.
Un alivio doble, porque el gol sirvió para encarrilar la victoria ante el Atlético B (2-0), un triunfo de tres puntos, como todos, pero que vale mucho más. Ha vuelto a inocular en la plantilla la esperanza de la permanencia. Sigue estando difícil. «Tenemos pie y medio en Tercera», decía el técnico Adolfo Senso el domingo. «Pero ahora mismo es cuando más creemos que podemos conseguirlo», remarca el punta canario, que hace dos temporadas jugaba en juveniles, en el CD Orientación Marítima, desde donde dio el salto directo a Segunda Federación con el Panadería Pulido San Mateo. «Fue un gran cambio, al principio me costó», reconoce.
Velocidad y espacios
También ha supuesto un cambio, cuenta, el fútbol peninsular. Y no solo por el clima. «Es distinto, más físico. El canario es un juego más de balón al pie», explica Rayco, que como todos los jóvenes futbolistas tiene la meta de poder vivir un día de esto, «ser profesional». Y quizás parecerse un poco a sus ídolos, Samuel Eto'o («cuando estaba en el Barça) e Ibrahimovic. Como ellos, el canario es un jugador que destaca por su velocidad y que va bien a los espacios. Y luchador, como demostró el pasado domingo, cuando se dejó el alma en el campo para conseguir los tres puntos. «Al descanso ya estaba pidiendo el
estaba reventado», reconoce entre risas. Pero tuvo que correr un poco más, y lo hizo.
Rayco ha jugado 27 de los 29 partidos de liga. Se ha perdido uno por sanción y otro por lesión. Aunque hay un `pero', que es el que quiere mejorar: solo ha sido titular en once ocasiones. Lo ha
conseguido en los dos últimos encuentros y en cada entrenamiento ahora pelea para prolongarlo en las cinco jornadas que restan en dura pugna con Javi Bernal.
Para su técnico solo tiene buenas palabras («como entrenador es fantástico y además estoy muy contento porque desde el principio ha confiado en mí»). También para el vestuario. «Es increíble cómo nos llevamos. Ahora estamos más unidos que nunca para la sacar adelante la situación».
No será fácil, asume Rayco, que cree vital sacar algo positivo de los dos próximos partidos ante rivales que están peleando por el playoff de ascenso, el Estepona este domingo (12.00 horas) y la Gimnástica Segoviana el día de San Jorge, el 23 de abril. Después le escambio, peran al Dioce tres rivales directos, tres encuentros que además tienen el añadido extra de que serán derbis: Don Benito, Coria y Montijo, estos dos últimos, el 7 y el 14 de mayo, ya con horario unificado para todos los partidos de la jornada: las 12.00.
Para estas jornadas que quedan ya no parece que el frío vaya a ser un problema para Rayco, que vive en Cáceres su primera experiencia lejos de su zona de confort, lejos de las Islas Afortunadas. «Tenía claro que había que salir para seguir creciendo y, de momento, este tiempo que llevo aquí me ha ayudado a crecer como persona y como futbolista». Ahora, el Diocesano necesita de sus goles. Y él quiere darle unos cuantos más.
«El vestuario está más unico que nunca para sacar adelante la situación», revela el atacante Rayco