El anillo con tráfico limitado se amplía con una veintena de vías
Campaña de la asociación vecinal para el trámite de la solicitud de la autorización Quedan unas 130 plazas para aparcar en la calle en el recinto con el tráfico restringido
Este miércoles ha entrado en vigor la modificación de la ordenanza municipal que regula el acceso de vehículos al espacio del centro donde el tráfico está regulada con cámaras. El acuerdo se adoptó en el mes de marzo, se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia del pasado 21 de abril y no ha entrado en vigor hasta que han transcurrido quince días hábiles. No obstante, para los efectos de estas variaciones, con sanciones para los que entren en las nuevas zonas con limitación, no se van a notar hasta dentro de unas semanas. En principio desde el ayuntamiento se habló de junio, pero antes se tendrían que poner al día todas la autorizaciones.
Coincidiendo con la entrada en vigor de la modificación de la ordenanza, la asociación vecinal de la ciudad monumental ha puesto en marcha una campaña para informar a los vecinos de los trámites a seguir para la concesión de las autorizaciones. Con estos cambios en la normativa municipal, el área restringida se amplía con una veintena de calles y vías más.
La zona con limitación de tráfico tiene desde este miércoles los siguientes límites: la plaza de San Francisco en el sureste, la calle Tenerías, después del cruce con la calle beato José Oriol, en el noreste, el cruce de las calles santo Domingo y Margallo en el noroeste y la conexión de San Antón con la avenida de España en el suroeste. El anillo se amplía por el oeste, con la incorporación de las calles San Antón y Parras, y por el lado sureste con la cámara que se instala en San Ildefonso y que tiene incidencia en la limitación de la circulación en una veintena de calles y plazas: San Ildefonso, Macarena, Consolación, plaza de las Candelas, Torremochada, plaza de Santa Clara, Soledad, Hornos, Gallegos, Cornudilla, Postigo, plaza de San Juan, plaza del doctor Durán, Pizarro, Sergio Sánchez, Fuente Nueva, Amor de Dios, Sierpes y Damas.
El área limitada, que aparece en el plano, se divide a su vez en siete zonas por la colocación de las cámaras. Son el recinto intramuros, la plaza Mayor y de la Concepción, Caleros y Tenerías, Roso de Luna y Clavellinas, San Antón, la plaza de las
Piñuelas y la calle San Ildefonso. Según detalló este miércoles el presidente de la asociación vecinal, Juan Manuel Honrado, la petición de la autorización de paso no solo la tienen que solicitar los afectados por las nuevas zonas donde se aplicará la restricción una vez que la ordenanza tenga un efecto real, sino también los de las calles donde ya existe esta limitación, «se pretende una actualización de todos los datos, la información que se nos ha dado desde la policía y la concejalía es que la tienen que renovar todos», según comentó el dirigente vecinal.
Hay tres tipos de autorizaciones: periódica, que permite el acceso habitual y que es la más frecuente, temporal, para casos puntuales, y permanente, que es sobre todo para servicios públicos municipales y de emergencias. La regulación de cada una y las condiciones para que se concedan están desarrolladas en la ordenanza que se publicó el pasado 21 de abril en el Boletín Oficial de la Provincia.
Tendrán derecho a circular por estas vías los usuarios y titulares de cocheras, los residentes, los propietarios de locales públicos, los clientes de los hoteles y negocios similares, los familiares de residentes con movilidad reducida, los titulares de tarjetas de estacionamiento de vehículos para personas con discapacidad, taxistas y los titulares de vehículos que necesiten entrar en el recinto a causa de ejecución de obras. La ordenanza
deja un apartado para otras situaciones que se puedan dar y regula la carga y descarga y el acceso de empresas de paquetería.
También, para el caso de la entrada por San Antón, podrán acceder los conductores que se dirijan al párking de obispo Galarza. La ordenanza autoriza a las empresas propietarias del aparcamiento a acceder a una parte del programa informático destinado a la entrada y salida de coches del área restringida para que introduzcan las matrículas de los turismos que utilicen el aparcamiento. Las empresas, según se indica en la normativa, deberán de habilitar algún sistema que advierta, con la debida antelación, a los posibles usuarios del párking por la calle San Antón sobre si el estacionamiento está completo o no.
Las sanciones que se establecen en la ordenanza están entre un máximo de 750 euros para las leves y de 1.501 a 3.000 euros para las infracciones muy graves.