Los muertos en carretera en la región no cesan: ya van 4 en lo que va de año
El último, este fin de semana: falleció una mujer que venía de ver a su hijo jugar al fútbol El 2023 cerró con un 70% más de muertes, el dato más alto de la última década
Los muertos en carretera no cesan en Extremadura. El año pasado fue el más negro de la última década, con 51 fallecidos al volante, un 70% más que en 2022. Pero las muertes continúan también en este 2024, pues desde que comenzara el nuevo año ya son cuatro las personas que han fallecido en accidente de tráfico en la región. Las dos últimas, la última semana. En concreto, este pasado domingo una mujer de 47 años perdió la vida tras colisionar el vehículo que conducía con la barrera de contención de la calzada, a la altura del kilómetro 33 de la carretera EX202, cerca de Fuente de Cantos. La víctima regresaba de asistir como espectadora a un partido de fútbol amistoso que acababa de disputar su hijo, jugador del Club Deportivo Zafra, en Bienvenida, contra el equipo de esa localidad.
El Zafra comunicó lo ocurrido en sus redes sociales: «Con el corazón encogido en un puño hemos recibido esta tarde la noticia del trágico fallecimiento de doña Eva Rosas, madre de nuestro jugador Abel Palacios, al que queremos mandar nuestro más afectuoso abrazo. Nuestras condolen
cias a familiares y amigos. DEP», manifestó. La fallecida fue atendida por los servicios de emergencias y, según las primeras hipótesis, previamente al accidente pudo sufrir una parada cardiorrespiratoria, lo que le hizo perder el control de su vehículo.
Solo cuatro días antes fallecía otra mujer de 70 años en la carretera EX-A1 (Autovía del Norte de Extremadura), a la altura del punto kilométrico 16,300, en término municipal de Majadas. Las causas aún están siendo analizadas y estudiadas por un equipo de atestados perteneciente al Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Cáceres. A ellas se unen los dos jóvenes de 20 y 23 años, naturales de Logrosán, que
perdieron la vida al chocar el vehículo en el que viajaban con un camión cisterna en el punto kilométrico 11 de la EX-355, la carretera que une Madrigalejo con Zorita. El conductor del camión resultó ileso. Las víctimas quedaron atrapadas dentro del turismo por lo que tuvieron que ser excarceladas por los bomberos. Las labores tardaron casi seis horas.
A la vista de estos primeros datos de 2024 todo parece indicar que Extremadura mantiene la senda de siniestralidad del pasado año, pues según las cifras publicadas por el Observatorio de la Seguridad Vial de la Dirección General de Tráfico (DGT) hasta el momento se han registrado los mismos fallecidos que en 2023. Y eso teniendo en cuenta que el pasado ejercicio la región anotó el dato de muertes en carretera más alto de la última década, con 51 víctimas mortales. Solo se acerca a la cifra del 2017, cuando fallecieron al volante 50 extremeños. Tras la de este ejercicio, el dato de muertos más alto se registró en 2016, con 45. Además, en 2022 hubo 30; en 2021, 27 y en 2020, 24. En 2019, 36; en 2018, 34; en 2015 42 y en 2014, 44.
Extremadura se entre las cinco comunidades donde se incrementan o mantienen los muertos
/ COMPARATIVA ENTRE REGIONES No obstante, Extremadura sí mejora, al menos en estos primeros días del año, en la comparativa con el resto de comunidades autónomas. De momento no se sitúa a la cabeza en incremento de accidentes mortales como ocurrió el año pasado. En este caso, se encuentra en quinto lugar, junto a Baleares, que también lleva los mismos fallecidos que en 2023, y por detrás de Murcia y Cantabria, que han notificado un muerto más; de Navarra (+2); de Aragón (+3) y de Andalucía (+9). Aunque la estadística extremeña sigue estando, eso sí, alejada del total nacional, que en lo que va de 2024 ha notificado también nueve fallecidos menos. En lo que va de año en el conjunto del país han perdido la vida en las carreteras 54 personas, frente a las 63 del mismo periodo de 2023.
Detrás de una gran parte de los accidentes mortales se encuentra el consumo de alcohol entre los conductores, tal y como advirtió en una entrevista con este diario el fiscal delegado de Seguridad Vial en Badajoz, Diego Yebra: «La gente está desinhibida porque la gran parte de los atropellos son en fiestas. Hay un consumo enorme de alcohol y drogas, tanto por parte de los conductores como de los peatones, que termina en este incremento (de accidentes mortales)», manifestó a finales de diciembre.
De hecho, según los datos aportados por el Ministerio Público, la Guardia Civil puso el año pasado un 20% más de denuncias a conductores por este motivo. Ante esta situación, volvió a incidir en la necesidad de implementar más controles para prevenir este tipo de siniestros.