La ciudad se vuelca en el homenaje al político y docente Kin Paredes
La palabra, las ▶ imágenes y la música fueron clave para recordarle
La ciudad trujillana acogió el pasado sábado, una propuesta tan emotiva como esperada. Se trató del homenaje al docente y político Kin Paredes, en el tercer aniversario de su fallecimiento. Un encuentro en el que se puso de manifiesto, una vez más, el cariño, el respeto y admiración que sus amigos y familiares le profesaban.
Así, el acto, que comenzó con una visita al cementerio y que contó con una intervención musical, posteriormente, se trasladó al Palacio de los Barrantes-Cervantes, cuya sala estuvo repleta durante las tres horas que duró la cita. En ella, la palabra, la música y las imágenes fueron clave para recordar las diferentes facetas y aristas de Paredes, que tal y como se vio a lo largo del homenaje, supo dejar huella en cada paso.
Precisamente, Pedro Escobar, quien fuera coordinador regional de Izquierda Unida y Belén de Miguel, compañera, amiga y coordinadora del evento, resaltaron la disposición, la coherencia y la empatía de Paredes en cada una de las acciones que emprendía.
En su caso, Escobar recordó en su intervención, a modo de carta, que «no podría haber sido lo que fue ni hacer lo que hizo sin él», a quien se dirigía cariñosamente como Quinito. Lo corroboró De Miguel: «era una estación de servicio abierta las 24 horas», dijo.
En esta línea se fueron sucediendo los numerosos discursos por parte de otros compañeros y amigos del ámbito político. como Inés Rubio, la alcaldesa; familiar y laboral. Paredes ejerció como profesor de Economía en el IES Francisco de Orellana de la ciudad.
Asimismo, fueron muchas las fotografías que se compartieron en diferentes vídeos y en los que se puso de relieve su implicación con los diferentes sectores de la sociedad, como el deporte o la música, que fue otra de las protagonistas indiscutible de la jornada.
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MÚSICA Y EMOCIÓN Una de las intervenciones musicales más emotivas fue la que llevó a cabo Ana, su mujer, que reconoció que se había «envalentonado» para interpretar un tema de Rozalén, a quien Kin admiraba y a quien había conseguido conocer en su propio instituto. `Y busqué' fue la canción elegida. «La cantaba llorando», recordaba, cuando falleció.
Luis Bravo, pianista y amigo de Paredes, interpretó tres emotivas obras, entre las que se encontraba una de sus favoritas, La milonga de Ginastera, a través de un vídeo y la soprano Rosario Cruz, también quiso incluirse al homenaje con tres temas, uno de ellos,`Unicornio', de Silvio Rodríguez, especialmente emotivo y conmovedor.
Y es que la música fue uno de los motores del docente. De hecho perteneció a la coral Santa María, de la que estuvieron presentes algunos de sus antiguos compañeros, entonando el `Va pensiero'.
El broche final lo puso la rondalla de la Asociación de Coros y Danzas Virgen del Rosario, que cantó, con Ana, su mujer y Marta y Justo Paredes, sus hermanos, entre otras canciones, el tema `Trujillana', compuesta por su padre.