El Periódico Extremadura

«Mi sueño es dormir tranquilo. Solo tengo 24 años y aún no he podido»

- Rapero IGNASI FORTUNY epextremad­ura@elperiodic­o.com BARCELONA

El rapero español acaba de hacer una gira europea que firmarían poquísimos artistas españoles, vendiendo miles de entradas sin ir de la mano de una gran promotora. Morad, de 24 años, ha presentado su primer disco, Reinsertan­do, y son ya cinco los años que lleva publicando canciones y en los que ha agrietado la industria musical y se ha convertido en icono, muchas veces incómodo y discutido.

– ¿Ha asimilado ya su gran `tour' europeo?

– Disfruté muchísimo, fue una experienci­a única que no puede vivir todo el mundo. Y yo, que vengo de donde vengo... Nunca había viajado a todos esos sitios a los que he ido a cantar. Y encontrar que había tanta gente en tantos sitios... Hay ciudades en Europa en las que he vendido igual que en una ciudad de España. Ha sido flipante.

– Sin una gran promotora ni festival detrás, ha hecho una gira que, por recintos y volumen de venta de entradas (entre 4.000 y 5.000 por fecha), lo firmarían muy pocos artistas españoles. ¿Cómo ha logrado tener tanto público fuera de aquí?

– Creo que es por la esencia, siempre me he mantenido igual. Eso es lo que ha hecho que la gente le coja aprecio a mi trabajo.

En buena parte, se entiende por la conexión que ha logrado con hijos de migrantes criados en esas ciudades.

– – Sí, eso me ha ayudado mucho. Supongo que es por la historia, las letras de primeras no las entienden, pero creo que a veces hay cosas que se transmiten con los ojos o con el sonido.

– ¿Considera que sus logros están suficiente­mente reconocido­s?

– En mi barrio, sí, mi gente cercana, sí, que es lo que me importa al fin y al cabo. Pero sí que notas un poco que fuera... No ves la misma repercusió­n de una cosa grande que pueda conseguir yo solo a la de una cosa pequeña mala que puede pasar cualquier día. Vas notando que hay cosas que he hecho, que son muy grandes para un chaval como yo, y que no le dan mérito. Creo que por ser yo o por lo que tengo detrás. Si fuese otra persona sí que se lo darían.

Siempre mantiene una pose, una actitud, como de que nada le sorprende. Ni con logros musicales, ni cuando Drake aplaude su música públicamen­te...

– – Sé que todo se va a acabar algún día. Para que no sea duro el día que se acabe todo esto. Como he crecido donde he crecido, he visto a muchas personas tener muchas cosas y luego quedarse sin nada. Entonces, el día que se vaya todo, pues podré estar tranquilo. El día de mañana me van a querer igual y voy a estar con las mismas personas.

– ¿Pero tiene miedo de que esto se rompa, que se agote el éxito?

– Al revés. Hace tres años pensaba que ya no iba a cantar más. Voy a seguir hasta que la gente me diga. Siempre he pensado que el día que sienta que la gente no está o que no estoy viviendo lo mismo que ahora, me iré. El día que baje, pues diré buenas noches y se lo agradeceré a todo el mundo. Si me tengo que ir ahora mismo, me podría ir. No necesito nada de la música. Mi sueño es hacer mi vida tranquilo y tener algún día una familia.

`Reinsertan­do' no es un título cualquiera. ¿Qué significad­o le da?

– – Cuando era menor estuve preso y había una frase que solía escuchar mucho: te tienes que reinsertar. Y llegó un momento que odié esa palabra porque pensaba que era una etiqueta mala. Como si uno no fuese persona. Reinsertad­o es como que... Mira, la palabra que más odiaba... Lo he cumplido, mira dónde estoy. He sacado un álbum, estoy en mi mejor momento y le he querido poner ese nombre para la gente que me ha visto ahí o sabe lo que es esa historia. Como un vacile a toda esa gente que me ha menospreci­ado en ese sitio, que ha pensado que iba a acabar mal o iba a acabar muerto o lo que fuese. Me deseaban ese mal, me decían que si no estudiaba no iba a llegar a nada en la vida y... Pues mira.

– ¿Por qué que no vieron esperanza en usted siendo tan solo un chaval?

– Los mayores torturan mucho a los jóvenes por no ser como ellos deberían haber sido en su momento. Yo perdí toda mi adolescenc­ia ahí dentro. Salí con 19, empecé en la música a los 19 o 20. Con 20 años es imposible ser perfecto en la vida. A veces te ponen muchas etiquetas sin saber que tú también puedes cometer fallos, ¡Y admitirlos, ya ves tú, sin problema! Pero uno también crece, y lo que pensaba con 20 años no lo pienso ahora con 24, eso es cuestión de tiempo. Que tenemos derecho a equivocarn­os.

– En las redes se le ve muchos ratos con niños de su barrio.

– Me dan esa calma que necesito ahora mismo en la música. Si estás todo el día rodeado de gente mayor, curtida en cosas malas, solo escuchas cosas negativas, como que todo es más negro. Todas las opiniones son un poco más oscuras. Con un niño no hay opiniones, te sacan de todo eso malo. Un niño no te falla, no te vende, no te traiciona. Hasta que no crezcan no sabes cómo van a ser.

– En el disco hay una canción titulada `Estopa' y también menciona al grupo en su última canción. ¿Qué representa el grupo para usted?

– No me he criado escuchándo­los, pero es un grupo que respeto mucho. Para mí son de lo más grande que tiene España. Hacen música tradiciona­l, de aquí, pero también tienen ese toque de barrio. Se los ve muy humildes, muy amigos. A mí me gustan mucho, la gente de mi barrio los escucha, muchas familias, mayores, jóvenes... Siempre los uso de referente, como que hasta un chico de la calle puede ponerse música de Estopa.

– De hecho, hay quien ve paralelism­os entre ellos y usted porque representa­n a dos olas migratoria­s distintas llegadas a Cataluña.

– No me importa de dónde sean o de dónde vengan, esas cosas no las miro yo. A mí me gustan por cómo son, su manera de ser. Me los encontré en un festival y he notado una presión que no he notado con artistas que salen número uno en Spotify. Llenan estadios, mueven masas. Me gustaría acabar como ellos, la verdad.

– ¿Qué le parece que su música se haya hecho tan transversa­l, que la escuche gente de todo tipo?

– Mi música no tiene fronteras, está hecha para todos. Es música fiestera, otras (canciones) son más tristes... Cada uno ha vivido una parte de una canción, no importa de qué barrio seas ni de qué clase social seas.

– España tiene ya como ídolos a artistas que son de orígenes muy diversos. ¿Cómo de importante cree que es esto para los jóvenes?

– En España el número uno siempre ha sido de fuera. Si fuese un país racista con la música, en los tiempos de Daddy Yankee y La Gasolina nadie lo hubiese escuchado. Toda la música que nosotros escuchábam­os cuando éramos más jóvenes era de fuera, y ahora, es verdad, en vez de escuchar lo de fuera, escuchas lo de aquí. Hay muchos artistas y es normal que, al final, acabe saliendo uno de tu origen o de donde vives. Eso ya no es raro, y es bueno.

– ¿Qué le queda por soñar y cumplir a Morad?

– Dormir tranquilo, ese es el objetivo de todo esto. Trabajo todos los días para que el día de mañana pueda dormir tranquilo, que tengo 24 años y aún no he podido dormir tranquilo. Y también me lo merezco.

 ?? JOAN CORTADELLA­S ?? El rapero Morad El Khattouti El Horami, conocido como Morad.
JOAN CORTADELLA­S El rapero Morad El Khattouti El Horami, conocido como Morad.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain