Quejas en Juan Carlos I por el nuevo techo de los soportales
Hay filtraciones de agua y se estropea el aire acondicionado por falta de ventilación El ayuntamiento asegura que la empresa que lo montó solucionará el problema
En la tienda de ropa Montana, situada en la calle Juan Carlos I, tuvieron que comprar un ventilador en verano y ahora en invierno adquirir un calefactor porque el aparato de aire acondicionado se estropeó, coincidiendo con la obra que ha acometido el Ayuntamiento de Badajoz de sustitución de los falsos techos de los soportales. Los anteriores eran de lamas metálicas y se han cambiado por pladur. El problema, según Damián Barroso, es con la unidad exterior de su aire acondicionado. Aunque colocaron rejillas, son demasiado pequeñas para el calor generado y se estropeó. Fue a quejarse al ayuntamiento y no le dieron solución.
En la joyería próxima han tenido el mismo inconveniente. Una de las trabajadoras cuenta que «al principio, en verano, como cerraron los techos no respiraban los aires acondicionados y dejaron de funcionar». Además, ha sido testigo de cómo la óptica situada justo al lado tenían puesta la calefacción porque hacía frío y por la noche empezó a salir «un montón de agua» del foco «que era una ducha». Asegura incluso que «olía a quemado y daba chispazos». «Lo han hecho muy mal, no han estudiado nada, han cerrado sin más y cuando llueve se hincha el techo porque coge humedad, un desastre», se queja esta trabajadora, que lamenta que nadie se haya acercado ni se haya preocupado «ni nos han pedido permiso para la obra».
En la óptica también se lamentan. Gonzalo cuenta que «desde que pusieron el nuevo techado en la calle se condensa mucho arriba,
En la óptica llegó a salir agua primero por la fachada y después por el foco de luz «como una ducha»
no transpiran los aires y a nosotros nos ha salido agua primero por la fachada y después por el foco de luz». En esta tienda temen que su aire acondicionado se estropeará, como en el resto de la calle. Están a la espera de la respuesta del seguro.
En la frutería se han percatado de los desperfectos. Se mojó el pladur del exterior y la pintura se ha desprendido. «Hemos dado las quejas», asegura Julián. «Lo han puesto peor de lo que estaba y cada vez que llueve se moja el pladur».
Aparentemente, la obra, que se ha acometido en el margen izquierdo de los soportales, ha mejorado el aspecto exterior de los falsos techos, que parecen más limpios. Salvo donde se aprecian las humedades en torno a los plafones de luz, de los que llega incluso a salir agua, y algunos desconchones de pintura. La obra la realizó el ayuntamiento a principios del año pasado y consistía en remozar los soportales de la avenida para darles mayor luminosidad, pues las lamas estaban en mal estado, sucias y con cableado suelto.
En el Ayuntamiento de Badajoz son conocedores de la situación porque les ha llegado la queja de los responsables de los locales comerciales. Fuentes municipales aseguraron ayer que están al corriente de lo que ocurre y lo están estudiando. Avanzaron que la empresa que montó el falso techo solucionará el problema.