18 años de trabajo inclusivo
Agustín Sánchez Torinos es empleado de Carrefour y pertenece a Down Cáceres
Agustín Sánchez Torinos tiene 45 años y puede presumir de llevar 18 como trabajador en la empresa Carrefour. Es uno de los mejores ejemplos de inclusión en la ciudad y para su colectivo, ya que demuestra que la continuidad en el empleo para una persona con síndrome de Down es posible. Pertenece a la asociación Down Cáceres, que trabaja en la defensa de los derechos e intereses de las personas y sus familias.
Trabaja como auxiliar en línea de caja y sus funciones consisten en colocar y recoger las cestas y los carros. Está siempre a disposición de los cajeros para ofrecer su ayuda siempre que la necesiten. No han sido sus únicas funciones en Carrefour, de hecho ha pasado casi toda su carrera en otras dedicaciones. Era uno de los reponedores del pasillo de los refrescos y los zumos, pero un problema de espalda obligó a la empresa a reubicarle el pasado mes de octubre: «Las cajas pesaban demasiado».
Entre sus competencias estaba también la de realizar la `rotación'. Esto significa que revisaba a diario la fecha de caducidad de los productos del pasillo en el que solía trabajar y situaba los que iban a caducar en una fecha más cercana más adelante con el objetivo de que su venta se realizase cuanto antes. «Soy una persona que nunca quiere dejar de trabajar. Quiero sacar mi familia adelante», bromea Agustín.
Pero no todo es el trabajo, también hay que saber pasarlo bien. Y Agustín sabe hacerlo de maravilla. Le encanta disfrutar con sus compañeros de la asociación en
las celebraciones de cumpleaños y viajar en verano. En 2023 visitó Torremolinos, pero su experiencia en la playa no fue muy satisfactoria: «Había demasiada arena».
Otras aficiones
Otra de sus aficiones es pasear. Suele hacerlo por la zona de Múltiples aunque el vive en La Mejostilla y, como va en su forma de ser,
también hace chistes con este tema: «Hay que adelgazar».
Es un amante de los puzzles y el deporte: «Me encanta ver fútbol sala y baloncesto». En cuanto a su equipo favorito reconoce que le tira mucho el color blanco, es del Real Madrid. Además, adora la natación: antes iba a menudo al centro ElPerú y se presentó a un campeonato en Guadalajara, donde consiguió una medalla. También le gusta la música, en concreto la de los años ochenta y noventa.
En su casa está Rocky, uno de sus más fieles amigos. Con él juega a todas horas en el patio, pero cuenta que no le gustan algunas situaciones: «Me lame la cara y le tengo que pedir que se esté quieto».