«La vida son cuatro días y uno es la Patatera»
Más de 10.000 personas se reunieron en la localidad malpartideña para ▶ celebrar su festejo más tradicional. Repartieron 2.600 raciones de embutido
La Pedida de la Patatera de Malpartida de Cáceres reunió este Martes de Carnaval a más de 10.000 personas por las calles de la localidad para celebrar su fiesta de más tradicional. El buen ambiente imperó en una jornada en la que personas llegadas de todos los puntos del país rememoran el viaje de los quintos por las calles del pueblo para pedir a los vecinos embutido. Eso sí, la fiesta acoge a todos los llegados por igual: «Viene gente de Barcelona, de Salamanca, de Madrid. Pero hoy todo el mundo es malpartideño, aquí nadie es de fuera».
El festejo, considerado de Interés Turístico Regional, inició en la plaza Mayor del municipio, donde la multitud aguardaba impaciente la aparición del alcalde, Alfredo Aguilera, para dar el pregón: «La vida son cuatro días y uno de ellos es la Patatera», voceó el regidor. «Lo único que pedimos es que se respeten las tradiciones. Lo característico de esta fiesta es lo que representa al municipio y a Extremadura: humildad, generosidad y hospitalidad. Que todo el mundo se dedique a disfrutar y deje los problemas fuera», pidió Aguilera. Después, sonaron los cohetes, el confeti comenzó a caer del cielo y la fiesta comenzó, amenizada por las charangas Armando jarana y Los del barrio. Pese a que el día prometía agua sobre Malpartida, respetó las primeras horas de fiesta y permitió que el desfile de carrozas se realizase sin impedimento. «Aunque hubiera llovido, la gente habría salido porque la gente tiene muchas ganas de disfrutar», señaló el alcalde. Más de 2.600 raciones de patatera con pan se repartieron a partir de las 15.00 horas en los Arcos de Santa Ana: «Habrá embutido para todo el mundo, no os preocupéis, la gente del pueblo también lo lleva», aclaró tras el pregón.
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UNA FIESTA SIN EDAD La Patatera no tiene edad. En el pasacalles participan desde niños recién nacidos, hasta personas de más de 80 años. Todos con el mismo fin: pasarlo en grande. «Hoy somos todos jóvenes, todos tendremos la misma edad. Vamos a ver cómo la gente mayor bailará y disfrutará de la verbena junto a adolescentes», sentenció Aguilera.
María Isabel Domínguez vive la
fiesta desde hace décadas y asegura que «es el día más grande del año para la gente del pueblo». Ataviada con el traje típico del festejo y un sombrero adornado con mimosas, indica entre risas que «he salido tal y como iba vestida por casa, yo voy así todos los días».
Juan García tiene 79 años y sigue disfrutando de la fiesta de la misma forma que lo hacía cuando era un niño. Cuenta que, desde pequeño, su madre le vestía todos los Martes de Carnaval con el traje típico para vivirlo de la misma forma que lo hacían los quintos hace décadas pidiendo patatera. Vestido con su camisa y portando una boina gris y una talega de colorines donde llevaba guardado el pan, García disfrutaba de una fiesta que «es fenomenal, lo más maravilloso que tenemos». «Aquí conseguimos juntar a personas de todos los pueblos», dijo orgulloso.
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LOS JÓVENES Los más jóvenes forman uno de los papeles más importantes en la fiesta. El relevo generacional está garantizado para un festejo en el que los adolescentes y veinteañeros no tienen reparo en vestirse con los trajes de la época. Un grupo de unos ocho chicos aseguran que «lo llevamos esperando un año entero, es el día por el que vive un malpartideño. Llevamos vistiéndonos así desde que tenemos uso de razón».
Cada carroza que participaba en el desfile llevaba una temática distinta y mecanismos sorprendentes. Por ejemplo, la de Alejandro Manzano y su grupo de amigos estaba decorada en honor al dragón virtual que se quedó a vivir en Malpartida de Cáceres tras la grabación de Juego de Tronos en la localidad. Además, portaba una bar
bacoa. Cuenta que la preparación no les lleva más de cuatro o cinco fines de semana, puesto que la estructura es la misma que otros años, pero el cambio de temática sí que conlleva más implicación. «Para nosotros es un día grande, celebramos una romería popular en el centro del pueblo, donde todo el mundo se disfraza y monta su carro para disfrutar de un día de convivencia en el que todos somos de Malpartida», señaló.
La fiesta continuó con discoteca móvil para los más jóvenes a partir de las 14.30 horas en la zona de ocio de la piscina municipal y la orquesta La Factoría se encargó del baile popular en la caseta municipal de la plaza Mayor junto al animador Dj Tito. Los actos por la fiesta de la Patatera finalizan este miércoles con el entierro de la sardina. A las 19.00 horas, las comparsas se encontrarán en la plaza Mayor y media hora después iniciará el pasacalle. Premiarán dos modalidades: infantil-juvenil con 125 euros para el primer premio y 75 para el segundo; y adultos (a partir de 16 años), con 150 euros para el primero, 100 para el segundo y 40 por participar. A continuación, quemarán todos los entierros con fuegos artificiales y habrá sardinada popular en la plaza de la Nora.