Sarmiento, pasión por el fútbol
El mediocentro del CPC habla del fútbol como una parte de su vida por la que no dejará nunca de pelear: «Si lo hago me estaría fallando a mí mismo» Cree que los partidos de casa son ya finales
Con solo 22 años, Jorge Sarmiento (Madrid, 22 de junio de 2001) tiene muy claro que aún le queda mucho por aprender. No para de repetirlo el futbolista del Cacereño, uno de los sub-23 que está en la plantilla desde el inicio del curso y que ha vuelto a ganar protagonismo en las últimas jornadas por la ausencia de alguno de los pesos pesados, esos veteranos de los que el medio centro verde asegura estar aprendiendo mucho.
«Es verdad que no está siendo la temporada que todos esperábamos, que está siendo un año difícil, pero yo estoy muy contento», dice, entusiasta, un jugador que tiene muy claro que quiere vivir del fútbol, que es un sueño para el que cada día vive al cien por cien. «Nunca dejaré el fútbol, es parte de mi vida y, si no lo intento hasta el último momento, me estaría fallando a mí mismo».
Del Rayo al Dépor
Ese sueño de vivir del fútbol le llevó, con solo 16 años, a La Coruña para jugar en la cantera del Deportivo. Desde los 11 había crecido en la del Rayo Vallecano, un club también importante. Pero vio la oportunidad y decidió probar. Hoy, seis años después, no duda de que acertó. «Esos cuatro años en el Deportivo son una de las experiencias más importantes de mi vida, fue algo maravilloso», cuenta el mediocentro del CPC, que antes de recalar en las filas verdes jugó dos cursos en el Alcorcón B.
Para Sarmiento esta es su segunda temporada en Segunda Federación, una categoría que define como muy competitiva. Sobre todo el grupo en el que este año está el Cacereño. «Ganas un partido y parece que puedes mirar para arriba, pero pierdes y te vas para abajo rápido. La liga está muy apretada y esto me gusta, porque no paras de competir, de estar en tensión. Es un nervio que, al menos a mi, me gusta».
Es pura pasión por el fútbol y por eso también está encantado de que haya aumentado la competitividad en los entrenamientos con la llegada de los refuerzos invernales. «Hay más competencia, se nota, y eso hace que los entrenamientos sean mejores porque todos queremos jugar y luchamos por el puesto. Todo lo que sea competir entrenando se va a notar después en los partidos. Esto va a hacer que estemos mejor y que se den mejores resultados»,
«Conocía la afición del Cacereño, pero hasta que no he estado aquí no me he dado cuenta de su dimensión»
indica el jugador coincidiendo con el análisis que el entrenador Julio Cobos hizo tras el empate del pasado domingo ante el Sanse (1-1), un resultado que dejó buenas sensaciones en la plantilla verde, como reconoce Sarmiento, pero que hay que hacer ahora bueno ganando en casa esta jornada al Unión Adarve (domingo, 12.00 horas).
Y ahí surge el problema, porque el Cacereño no está obteniendo los resultados deseados en el Príncipe Felipe (solo 9 puntos de 30 posibles). «Es ahí donde tendríamos que ser más fuertes y donde más se nos está complican
do». El miedo a fallar hace, cree Sarmiento, que se autopresionen más los jugadores. «Tenemos que intentar mejorar», apunta abiertamente el futbolista, que ve una final en cada partido que juegan como local. «Tenemos que hacerlo bien ante nuestra gente porque si ganáramos en casa, la liga sería diferente, pues a domicilio somos uno de los mejores», concluye Sarmiento, que se deshace en elogios para la afición del CPC. «Ya la conocía de cuando jugué con el Alcorcón B, pero hasta que no he estado aquí no me he dado cuenta de su dimensión».