Un plan regional prevé combatir la sequía con más de 217 millones
Guardiola anuncia que llegará a más de 450.000 extremeños y garantizará el suministro en la región Habrá balsas en Jerte y en Cabezuela del Valle y conducción desde el depósito de Medina de las Torres
La falta de agua provocada por la escasez de lluvias no da tregua y toca tomar medidas para evitar dolores de cabeza. Por ello, el Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura presentó ayer un ambicioso plan de garantía y de calidad del agua potable que cuenta con una inversión superior a 217 millones de euros y que va a llegar a más de 450.000 ciudadanos de toda la región. En este sentido, la presidenta del Ejecutivo regional, María Guardiola, señaló en rueda de prensa que el objetivo «es garantizar el suministro y la mejora del abastecimiento», así como la «eficiencia energética en las instalaciones» de todas las comarcas.
Entre las actuaciones más destacadas, la presidenta extremeña mencionó la construcción de balsas en el Jerte y en Cabezuela del Valle (Cáceres), que aumentan de forma significativa su población en verano, y la nueva conducción desde el depósito de Medina de las Torres para el abastecimiento a Valencia del Ventoso (Badajoz), cuyos vecinos han convocado acciones de protesta en diferentes ocasiones exigiendo soluciones a este problema, «totalmente justificadas, porque el agua que llega a sus hogares sale turbia», subrayó. Cabe destacar que según expresó, de «manera inminente» se va a firmar el contrato y van a comenzar las obras de la nueva conducción desde el depósito de Medina de las Torres para abastecer a Valencia del Ventoso con una inversión cercana a los dos millones de euros.
«Todas las comarcas de Extremadura se van a ver beneficiadas e incluidas en este plan para que los ciudadanos tengan garantizado un bien básico como es el agua», afirmó la dirigente extremeña. Del mismo modo, la presidenta extremeña insistió en que «cada gota cuenta» y que la política de su gobierno es anteponer el abastecimiento y el suministro a los ciudadanos «a esas políticas excesivamente ambientalistas por las que se han quedado atrás proyectos como puede ser el de la presa del Bujo, sobre el río Ardila, que hubiera asegurado el agua a la zona de Tentudía y que carecía de informes medioambientales favorables», recordó. El nuevo plan será
financiado con fondos Feder e incluye algunas actuaciones del anterior que no se ejecutaron y que han supuesto la pérdida de 30 millones de euros de financiación europea, según comentó.
Las actuaciones, que está previsto iniciar durante este año y los dos próximos, se han programado «con sensatez» para poder cum
plir los plazos establecidos en un proyecto «que es creíble, que es real, y que va a solucionar un problema de abastecimiento que tenemos en muchas zonas de Extremadura», resaltó Guardiola.
En esta misma línea, recordó que la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible sacó a licitación el pasado enero el
contrato de asistencia técnica para la conservación y explotación de las 42 presas y embalses que tiene bajo su competencia por un importe de 3,5 millones de euros. En su conjunto, apuntó, abastecen a 147 municipios y 168.000 habitantes censados, una cuantía que en verano se duplica.
Respecto a las dificultades de
suministro que sufre la comarca pacense de Tentudía, la presidenta de la explicó que la competencia en esta materia es estatal y que se está trabajando «de la mano» de Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) para ofrecer una solución con el embalse de Villalba, «que entiendo que lo llevarán a cabo lo antes posible».