Malpartida de Cáceres entierra la sardina
Cientos de personas llenan las calles del municipio cacereño para despedir el Carnaval Las comparsas ★ y los fuegos artificiales ponen el último toque de color a esta festividad ligada a La Pedida de la Patatera
El Entierro de la Sardina pone fin al carnaval de Malpartida de Cáceres, que está ligado a la Fiesta de Interés Turístico Regional `La Pedida de la Patatera', una tradición que se remonta a finales del siglo XIX cuando los jóvenes de la localidad, principalmente los quintos, acostumbraban a pedir patatera y otros manjares de la zona para degustarlos en las diferentes tabernas del pueblo.
Diecisiete grupos participaron, diez de adultos y siete infantiles, en el entierro. «Nos llevamos disfrazando muchos años y ahora seguimos con los peques para inculcarle la tradición», comentó María José, de la comparsa `Malpartideños en la Luna', que estaban disfrazados de astronautas y alienígenas. «Nos gusta apuntarnos para que disfruten los niños», añadió Arantza Flores del grupo `Los coches locos' con 34 miembros caracterizando los típicos autos de choque de la feria.
«Participamos por tradición, pe
ro también porque queremos que continúen las demás festividades del carnaval», destacó Juan José Doncel, de Club la Paz, cuyas vestimentas eran de luto debido a El Entierro de la Sardina. Desde los grupos `Leones y fantasía', de niños, y `Mago de Oz', de mayores, resaltaron que todos sus disfraces son caseros. «Nos disfrazamos porque nos gustan mucho los disfraces e intentamos participar en todas las fiestas», destacaron desde `Los de siempre y cia', que iban caracterizados de las míticas cartas de corazones, vestimenta
apropiada porque «es el día de los enamorados».
El día que concluye con la festividad malpartideña comenzó sobre las siete de la tarde con el encuentro de las comparsas en la Plaza Mayor. Las agrupaciones carnavalescas, con un mínimo de ocho miembros, se inscribieron en las puertas del ayuntamiento local para poder optar a los diferentes premios.
Tras el pertinente registro por parte de los participantes, dio lugar al tradicional pasacalles que llenó de alegría y color los caminos de
Malpartida de Cáceres. El recorrido de las comparsas atravesó la Plaza Mayor, la Calle Iglesia, Santa Catalina, Avenida de Cervantes y la Plaza de La Nora.
La marcha de las comparsas dio paso a la quema de todos los entierros, en la Plaza de la Nora, animada con fuegos artificiales que llenaron de colorido, esta vez los cielos, de toda la localidad. Este fin de fiesta estuvo acompañado del tradicional plato de cierre: una sardinada para todo el que se acercó a la zona.