Luismi y el Llerenense conservan la calma a pesar de la mala racha
Ni entrenador ni club entran en nerviosismo a pesar de los cinco partidos seguidos perdidos
Hace un mes y medio era el equipo de moda del grupo y el mejor de entre los extremeños. Apenas cinco jornadas después, es el equipo que sabía que iba a estar con la soga al cuello para lograr la permanencia. Ni una cosa ni la otra ha deslumbrado a su entrenador. El Llerenense trata
de tener los pies en la tierra y la cabeza fría en su momento más delicado de la temporada. Son cinco las derrotas consecutivas que ha encajado el conjunto de la Campiñar Sur que, además, no ha sido capaz de marcar gol en esos cinco partidos.
«La realidad es que no tengo una gravísima preocupación por lo que ha pasado. Es una evidencia que no hemos sido capaces de materializar las muchas oportunidades
de gol que hemos tenido. A veces, hemos llegado muchas más veces que el contrario y ellos, a la primera, nos la han metido. Sinceramente, no le veo un grave problema al equipo. Hacemos exactamente lo mismo que hacíamos hace mes y medio», reflexiona Luismi Álvarez, el técnico.
En el último encuentro ante el Villanovense, Luismi apostó incluso por cambiar de sistema de juego. «Y nos salió un partido prácticamente perfecto. Pero volvimos a tenerlas muy claras. Lázaro le sacó una muy clara a Víctor que hubiera cambiado el partido. La verdad es que, si viene alguien y me dice cuál es el problema, yo le escucharía. Pero es que no lo hay. Es una cuestión de acierto».
Luismi: «Hacemos exactamente lo mismo que hacíamos hace mes y medio»
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COMPETITIVO El Llerenense sigue siendo el mismo equipo alegre y correoso que inició la temporada y deslumbró a muchos con una primera vuelta de sobresaliente. Pero ahora, sale cruz en la moneda. «Muchas veces, todo es mental. En eso sí estamos trabajando más. En saber reponernos cuando nosotros no acertamos y el rival sí», asiente su entrenador.
Sigue tranquilo su cuerpo técnico por el carácter competitivo de su equipo. Considera que están muy bien adaptados a la categoría y que no han sufrido traumas como otros equipos que vienen de otras ligas. «La cabeza tiene que generar positividad. Ocurre en el Badajoz, que veo que tiene un equipo de superior categoría. Pero cuando te metes ahí abajo es difícil salir».
Luismi Álvarez está encantado con los fichajes. «Nos van a dar muchísimo y ya lo están haciendo». Y reconoce que tienen que pelear con las armas que tienen «porque no valen excusas».
Al técnico del Llerenense, que ya le penaliza una plantilla corta, se le suman dos contratiempos más. Por un lado, Maxi Ribeiro, que sufre una rotura fibrilar en el abductor y estará varias semanas en el dique seco. Y, por otro lado, Dani Martínez, que fue el mejor del equipo ante el Villanovense, pero tuvo que marcharse lesionado. En principio, parece que no hay rotura muscular, pero hay que esperar la evolución de la semana.