La puesta de largo de Iñigo Pérez pone a prueba al Real Madrid
El Rayo Vallecano estrena técnico en un partido en el que los de Ancelotti vuelven a tener muchas bajas
La puesta de largo de Iñigo Pérez como nuevo técnico del Rayo Vallecano, con el reto de volver a celebrar un triunfo en casa cinco meses, examina la regularidad de un Real Madrid con malos recuerdos recientes en Vallecas, y el firme caminar hacia el título del líder. Siete triunfos y un empate en las ocho últimas jornadas, lanzan al Real Madrid hacia el título. La exhibición de firmeza y superioridad ante el Girona, en el inesperado pulso por el título, da paso a una visita incómoda a uno de los vecinos. En Vallecas perdió el equipo blanco dos de sus tres últimas visitas. Un aviso para no levantar el pie para los jugadores de Carlo Ancelotti.
Porque además lo encaran con bajas de importancia, en una continua superación a los problemas que se les presenta en el camino. Saliendo airosos en `Champions' de un día de irregularidad en el juego, en Alemania ante el Leipzig, venciendo también en la dificultad. De nuevo sin el belga Thibaut Courtois en portería, con una defensa de circunstancias sin Èder Militao, David Alaba ni Antonio Rüdiger. Añadiendo la baja por sanción de Ferland Mendy. Sin el factor diferencial, el inglés Jude Bellingham.
Provoca que Ancelotti piense retoques a su equipo. Con la posibilidad de dar un partido a Kepa Arrizabalaga, perdedor del pulso con Andriy Lunin. La entrada en defensa de Fran García en el carril izquierdo que fue suyo en Vallecas en unas temporadas en las que dio el salto. Y el premio a la paciencia de Luka Modric, en un rol bien distinto a sus 38 años pero ejemplar en el vestuario. Apenas 34 minutos en un mes de febrero con partidos de altos vuelos.
La principal decisión del técnico madridista llega con un futbolista que se está ganando galones. Brahim firmó con un golazo el triunfo europeo. En su anterior titularidad marcó en el derbi ante el Atlético de Madrid. Alimenta un pulso con Rodrygo Goes.