El Montijo resiste y se permite creer
Primera victoria en el banquillo para Jesús Acevedo tras una remontada que deja vivas las opciones de salvación
El Montijo está cumpliendo con su gran cometido de la segunda vuelta: ser competitivo y no arrojar nunca la toalla. La prueba más irrefutable para ello fue la victoria de este domingo ante el Unión Adarve en el estadio Emilio Macarro, con una de esas remontadas que hacen equipo y vestuario y que otorga a los rojillos licencia para soñar. O, al menos, para no rendirse antes de tiempo.
Los puestos de permanencia siguen estando lejos a nueve jornadas del final. Concretamente, a siete puntos. Pero el Montijo dio muestras este pasado fin de semana de que no será una comparsa en la competición y que, el que se relaje, lo pagará caro. Algo parecido le ocurrió al Unión Adarve, que estuvo buscando con ahínco su golito en Montijo y, cuando lo consiguió, se pensó que tenía todo el trabajo hecho. Eso no va a suceder en Montijo.
Salió mejor el cuadro madrileño en la primera parte, atacando, dominando y generando oportunidades. Expósito avisó primero con un lanzamiento que se marchó fuera. También lo hizo Álvaro Sánchez. Primero, con un disparo que se marchó por poco desde larga distancia. Y, más tarde, con un cabezazo que rozó la cruceta de la portería de Alex Dos Santos.
Tuvo que esperar casi media hora el Montijo para poder reaccionar. Al cuadro de Jesús Acevedo le ha venido de maravilla la recuperación de David Calles, que la ofrece mucha profundidad en el lateral y consistencia en defensa. Fue de los mejores en la victoria.
La más clara del Montijo en la primera parte la tuvo Santiago Muller, pero su disparo se estrelló en la madera cuando parecía gol.
También salvó los muebles Alex Dos Santos antes del descanso con un remate peligroso de Álvaro dentro del área pequeña.
Todas las cosas importantes sucedieron en la segunda parte. El Unión Adarve fue ganando metros en ataque y con Álvaro Sánchez como gran referencia generó oportunidades claras. Sin embargo, el gol llegó a balón parado. Fue obra de Expósito, que lanzó una falta de forma muy pícara por debajo de la barrera, de forma rasa, que sorprendió a Alex Dos Santos para hacer el 0-1.
Parecía que el gol asentaba los planes del equipo madrileño y dejaría prácticamente tocado al Montijo. Pero nada de eso ocurrió. La reacción del cuadro extremeño fue ejemplar, propio de un equipo más veterano. Primero llegó el gol de Darius en una jugada preciosa de Runy. El de Hornachos, en los momentos complicados, se echa al Montijo a sus espaldas y está demostrando ser un futbolista determinante en el grupo. El rechace de su disparo lo cazó el ariete rumano para empatar el partido en el área pequeña.
No se conformó con eso el Montijo, que decidió jugar a la ruleta rusa de las oportunidades pa
ra doblar el premio. Y le salió. Fue a la salida de un córner donde tras un rechace Mauro cazó la pelota al vuelo y creó una asistencia perfecta para Muller que, en posición habilitada, controló, se acomodó y determinó por debajo de las piernas del portero. Gol, remontada y a currar los últimos diez minutos del partido.
Pudo sentenciar Runy en una cabalgada que no terminó de cerrar como todo el mundo esperaba. Justo cuando iba a disparar en el mano a mano, Pescador le arrebató la pelota para desesperación del atacante extremeño.
También pudo empatar en los instantes finales el Unión Adarve. Primero, en un disparo desde la frontal que se marchó fuera por poco. Y, en el descuento, con un último intento de Álvaro Sánchez que acertó a despejar bien Alex Dos Santos.
El Montijo consiguió cerrar el partido para ganar tres puntos que le dan vida. Todavía sigue lejos de los puestos de salvación, pero manda un aviso a navegantes de que no está en esta competición para ver pasar las jornadas. El que se relaje lo puede pagar caro. Y, desde luego, nadie arroja todavía la toalla.