Un mes sin rastro: desde los buzos en el Tajo hasta un vuelo con drones
Desde que Vicente Sánchez desapareciera hace ya un mes, la Guardia Civil ha desplegado esfuerzos para encontrarle sobre el terreno. De forma paralela a la investigación que este jueves ha avanzado con la detención del alguacil del ayuntamiento, la comandancia ha repartido a los equipos y especialistas por tierra, agua y aire. Todas las jornadas de búsqueda finalizaron con el mismo resultado.
Si la denuncia fue interpuesta el 27 de febrero, el primer dispositivo oficial de búsqueda tuvo lugar el mismo de 1 febrero y fue uno de los más numerosos en personal. Contó con un gran despliegue a pie, entre vecinos y voluntarios de Cruz Roja y Protección Civil que peinaron durante horas las inmediaciones de la localidad cacereña. Todos ellos estuvieron acompañaron
de los bomberos con perros y a los equipos de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil.
Al día siguiente, se centró en los pozos y charcas. Participó el equipo de actividades subacuáticas (Geas) que tiene su sede en Badajoz y contó con la colaboración de las cámaras de Cruz Roja y los agentes y voluntarios complementaron la búsqueda acuática con una nueva batida a pie. Fue el 15 de febrero cuando otra vez los submarinistas de Badajoz regresaron para registrar el cauce del río Tajo.
Así, tras descartar los caminos, los alrededores, los pozos y los ríos, la búsqueda añadió un nuevo capítulo el pasado viernes, en una jornada que se limitó una batida aérea con los drones del equipo Pegaso y en la que estuvo presente el delegado del Gobierno.