Inesperado tropiezo villanovense
El Navalcarnero gana al sorprendido equipo serón, que da otro paso atrás en su aspiración
Tarde soleada pero fresca la que se vivía en el Municipal Villanovense para ver un encuentro entre el Villanovense y el Navalcarnero con final negativo para los serones, que cayeron por 0-1 ante los madrileños y desaprovecharon una opción nítida de respirar y, quién sabe, mirar definitivamente para los puestos altos. Lo mejor fue el homenaje al histórico capitán serón, Ángel Pajuelo, que cumplió 500 partidos en el club.
Fue desde el inicio un duelo de titanes en el terreno de juego donde ya en los primeros minutos se palpó la intensidad y la lucha por el dominio rival. Se sabía la importancia del encuentro y ambos conjuntos no querían pasar la oportunidad de sumar esos tres puntos que les de una bocanada de aire en la clasificación.
En los primeros compases, ambos conjuntos mostraron su garra, buscando el control del balón y tratando de imponer su estilo de juego a pesar de las grandes rachas de viento que establecían en el Municipal. Sin embargo, las defensas se mostraban sólidas, y las jugadas de peligro escaseaban realmente
Pero la tensión en el terreno de juego no solo se reflejaba en las acciones futbolísticas. Tras un saque de esquina, el segundo técnico del conjunto visitante vio la cartulina roja tras una serie de protestas al colegiado.
El primer cuarto de hora transcurrió con el Villanovense apoderándose gradualmente del balón, aunque con dificultades para conectar con sus atacantes y generar peligro real, aunque la polémica no tardó en llegar al encuentro. En el minuto 16, los visitantes reclamaron un posible penalti sobre Mario Rivas, pero el colegiado no concedió la pena máxima. Sin embargo, en el minuto 22, el Villanovense tuvo una clara ocasión de
gol, con Adi quedándose solo frente al portero, pero entre el viento y Aizpiri pararon el esférico que iba dirección portería.
El primer aviso llegó por mediación de Mario Rivas cuando estrelló el balón en el larguero tras un tiro certero que llegó a tocar Lázaro con la punta de los dedos. El Navalcarnero disfrutaba de las mejores ocasiones del encuentro y tanto fue el cántaro a la fuente que el destino fue cruel con el Villanovense. Tras una falta lateral botada al punto de penalti, el esférico llega a la testa de Aizpiri y lograba meter el balón por la escuadra dejando sin opciones a Lázaro de detener el remate.
A pesar de los esfuerzos del Villanovense por igualar el marcador, la primera mitad terminó con ventaja para los visitantes en un partido marcado por las difíciles condiciones climáticas y por el buen planteamiento mostrado por el conjunto de Guillermo Fernández.
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FALTA DE CHISPA Con el inicio de la segunda parte, el Villanovense buscó con ahínco revertir la situación. Sin embargo, el juego continuó trabado
y las ocasiones de gol escaseaban por parte de los locales. La búsqueda a Adi con referencia en ataque era fallida y las segundas jugadas escaseaban en el Municipal.
Gus intentó poner soluciones y mandó entrar a David Agudo, Bermu y Aday en búsqueda del gol que les metiera el partido, pero a medida que avanzaba la segunda mitad, la situación era cada vez más complicada para los locales.
A pesar de los intentos del Villanovense por igualar el marcador, el tiempo se escurrió sin que lograran concretar sus oportunidades. La última llegó en el tiempo añadido por mediación de David Agudo, pero su cabezazo tras una magnifica jugada de Bermu se marchó por encima de la meta de Oscar López.
Finalmente, la victoria cayó del lado visitante con tres puntos que dan un respiro a los madrileños y que a la vez ponen en preaviso a los serones. Próxima parada derbi extremeño en la capital pacense, que se prevé vital para ambos conjuntos extremeños y que, sin duda, tendrá la máxima emoción con muchas cosas en juego.