El Montijo pierde la fe y la mayor parte de sus opciones
La derrota en casa ante un rival directo le deja casi sin posibilidades
El Montijo dijo adiós prácticamente a sus opciones de permanencia con una dura derrota en su feudo ante un directo rival por la permanencia como el San Fernando, que dejó prácticamente sentenciado al cuadro extremeño en otro buen partido para los de Jesús Acevedo que, definitivamente, dejó claro que a la plantilla no le llega para salvar la categoría. Salvo sorpresa, aunque resten siete partidos, el Montijo debe ir planificando su próxima campaña en Tercera porque para salvarse debería ganar prácticamente todos los encuentros que quedan por delante.
Volvió a competir el Montijo, que es lo que se le demanda al equipo, pero dejó patente que le falta calidad y pegada para superar a rivales de esta categoría con normalidad.
El líder de los montijanos fue Runy. El de Hornachos se echó al equipo a sus espaldas, pero su talento no basta para ganar encuentros. Suya fue la primera oportunidad del partido con un disparo tras una falta que él mismo se cocinó y que se marchó fuera por muy poco.
Respondió rápido el San Fernando, que se fue asentando sobre el césped conforme pasaban sus minutos. Fue Saúl el que desperició un mano a mano ante Dos Santos cuando su disparo fue repelido in extremis por un rival.
El conjunto canario aprovechó su asentamiento en el terreno de juego para adelantarse en el marcado. El gol llegó en el ecuador del primer acto en una gran jugada individual de Pipa que, tras desbordar a Pere Haro, puso un centro medido al corazón del área que remató de forma inapelable el delantero Saúl. Tocaba remar a un Montijo que se veía contra las cuerdas.
Los primeros atisbos de reacción se vieron al término de la primera parte. En una de las escasas ocasiones, otro zapatazo de Runy se marchó fuera por muy poco.
Salió el conjunto extremeño con una gran actitud en la segunda parte y, paulatinamente, fue encajonando al San Fernando en su campo. El empate no tardó en llegar y lo hizo en una armónica jugada en colectivo que acabó en las botas de Runy. El de Hornachos, omnipresente en todas las acciones de ataque de su equipo, puso un centro fabuloso para que Santi Müller rematara a la perfección y despertara a los pocos aficionados que se dieron cita en el Emilio Macarro. La situación del equipo y el adelanto horario no ayudaron y se vio la peor entrada de la temporada.
El gol espoleó al Montijo que se fue decididamente a por el encuentro sabiendo que sus poca vida en la categoría dependía más que nunca de ganar este partido. Runy volvió a tener una ocasión inmejorable, pero en el mano a mano Fermín le adivinó las intenciones en la ocasión más clara para adelantarse en el electrónico.
El San Fernando, distinto al de la primera parte y agazapado atrás, soltó un latigazo por medio de Saúl que se estrelló en el larguero. Los canarios sabían que, si el Montijo daba un paso en falso, ellos podían ganar el partido. Y ocurrió.
Fue a cuatro minutos del final cuando llegó el gol decisivo del partido. Una gran jugada individual de Adrián, salido en la segunda parte, acabó con el balón dentro del área pequeña. Saúl lo cazó y, ante la permisividad de la defensa local, se dio la vuelta y fusiló a Dos Santos para reventar la ilusión montijana.
Lejos de derrumbarse, el Montijo no perdió la fe y se fue con todo arriba. Gustavo tuvo una muy clara y luego la tuvo también Darius, pero al Montijo le falta esa pegada que se paga en la categoría y que lo ha condenado al últim puesto. La derrota en el Emilio Macarro huele a descenso. Sólo quedan vivas las matemáticas.