El Vicente Sanz acoge una jornada lúdica de escolares
Dirigido a alumnos nacidos entre 2008 y 2011 para fomentar la actividad física
El estadio municipal Vicente Sanz, en Don Benito, ha acogido recientemente la celebración de una jornada deportiva entre los diferentes centros educativos de la localidad dombenitense. En concreto, según han informado desde el consistorio, se trata de la quinta edición de un evento que congrega a los a los alumnos de los cuatro centros educativos de secundaria de la localidad y los dos colegios concertados. Se lleva celebrando desde el 2018 y sólo se ha interrumpido en dos ocasiones como consecuencia de la pandemia.
Los alumnos nacidos entre 2008 y 2011, divididos en dos categorías por edad y dos por sexto, compitieron de un «espléndido ambiente de deportividad», según el consistorio. De esta forma, todos ellos desarrollaron distintas actividades deportivas, entre las que se encuentra las modalidades de fútbol o voleibol, entre otras disciplinas deportiva.
Tras el desarrollo de las citadas actividades tuvo lugar una entrega de medallas y trofeos que conviritó el evento en el momento culmen del torneo y los competidores pudieron recibir los galardones. El concejal de Deportes, Miguel Adámez, acudió al acto y felicitó a los participantes, así como les alentó a seguir practicando la actividad física «como parte importante de su desarrollo personal», según han apuntado desde el Ayuntamiento de Don Benito.
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OBRAS EN EL ESTADIO Días atrás ya informaron que la grada de preferencia de este recinto deportivo, con capacidad para unas 900 personas, iba a ser clausurada debido a que un informe recomiende su demolición. Todo ello tras un encargo de la Delegación Municipal de Deportes para conocer el estado de la estructura de la misma, en el que se han detectado «irregularidades y deficiencias». De este modo, el concejal del ramo ya tachó de «deplorable» el estado en el que se encuentra la grada a causa de lo que considera «dejadez y falta de mantenimiento en mucho tiempo».
Estas instalaciones datan de los años 70 y estado «pone en peligro la seguridad de los asistentes». Ahora se prevé la construcción de
un nuevo graderío una vez que se proceda a la demolición de la estructura existente. La puesta en marcha de una nueva supondrá una inversión de unos 200.000 euros y la intención es que pueda estar lista antes de que dé comienzo
la próxima temporada de fútbol. En este sentido, desde el consistorio dicen que esta situación «se suma a las deficiencias» en otras instalaciones deportivas que están abordando desde el actual equipo de gobierno.