La nueva ley del plurilingüismo va adelante con mayoría en Les Corts
B ‘OK’ del pleno con los votos del PSPV, Compromís y Podem y en contra de PP y Cs b La norma arranca su tramitación con vistas a estar aprobada antes de abrirse la matrícula
Va adelante. La proposición presentada por los tres partidos del Pacte del Botànic, PSPV, Compromís y Podem, para la elaboración de una nueva ley de plurilingüismo, que fija un mínimo del 25% de horas lectivas en castellano y valenciano y una horquilla con el inglés entre un 15% y un 25%, inició ayer su tramitación parlamentaria tras el OK de la mayoría del pleno para que entre en vigor en el curso 2018/2019.
El hemiciclo tomó en consideración la norma, que sustituirá al decreto suspendido cautelarmente por el TSJ, con los votos a favor de los proponentes y cuatro exdiputados de Ciudadanos (Cs). El PP y Cs votaron en contra, al juzgar que quiere es «imponer un modelo lingüístico similar al catalán».
La iniciativa, con el criterio favorable del Consell, desliga la premisa de a más valenciano más inglés como recogía el primer decreto, y prevé desarrollar en otra normativa la posibilidad de certificar el aprendizaje de idiomas, uno de los puntos calientes del veto.
La posibilidad de exenciones del valenciano en zonas castellanohablantes que contempla la Llei d’Ús se mantiene, si bien el texto contempla un esfuerzo de la Generalitat para lograr la plena implantación del plurilingüismo en forma de formación a los docentes, profesorado extra o material curricular específico.
La proposición contempla que «la Conselleria promoverá que los centros vehiculen los porcentajes máximos, tanto para el valenciano, un 50%; y el inglés, el 25%», lo que no gustó a PP y Cs. POSICIONES // Por Compromís, Josep Nadal afirmó que la iniciativa se presenta ante «la deslealtad del PP, que se dedica a judicializar la mayoría de iniciativas legislativas del Consell», y busca que «el alumnado acabe sus estudios dominando castellano, valenciano e inglés». Y pidió a PP y Cs poder llegar a acuerdos, dejando «el conflicto identitario en casa».
Beatriz Gascó (PP) rechazó la ley por considerar que es «ilegal» y «sectaria», que «da la espalda a las familias» y vulnera derechos fundamentales, y pretende ser «un calco del modelo catalán», y advirtió de que el PP «no apoyará las ansias nacionalistas» del conseller, Vicent Marzà. Lo mismo dijo la diputada de Cs Mercedes Ventura, quien «no tolerará» el «chantaje a la Comunitat» ni apoyarán «normas marcadas ideológicamente al estilo Compromís».
Por el PSPV, Manolo Mata, pidió al PP y a Cs que se lean el decreto y «no satanicen la posibilidad de que una generación de niños hable las tres lenguas», y les ha dicho que «el valenciano no morirá porque ustedes quieran matarlo». César Jiménez (Podem) defendió sus aportaciones para hacer del plurilingüismo un modelo «útil». H Les Corts dio ayer luz verde a la tramitación de la proposición de ley.