Las reacciones
volución de Miguel Álvarez, que sentó en el banquillo a Rubén Mesa y a Mario para dar salida a la movilidad de Akale y Simón en la zona de tres cuartos. Y no pudo dar mejor resultado, ya que a los tres minutos Akale definió una jugada de combinación del filial con un disparo colocado desde la frontal del área visitante.
Con toda la carne en el asador por parte del Villarreal B, el Olot apenas se prodigó en ataque. Sin embargo, en la primera vez que llegó al área local en la segunda mitad consiguió un penalti a favor. Simón cometió manos dentro del área propia y el árbitro no dudó en señalar la infracción.
JUGANDO CON EL RELOJ / La pena máxima la transformó con sangre fría Marc Mas con un disparo estilo Panenka que el arquero del Villarreal B estuvo a punto de detener. La desventaja no desanimó al filial pero sí hizo respirar al Olot, que se estaba viendo superado por el juego local. Desde el momento en el que consiguieron volver a cobrar ventaja los visitantes llegaron la pérdidas de tiempo. Poco a poco la intensidad del ataque local se difuminó y la zaga catalana se fue imponiendo.
Ya en el minuto 90, Quintillà, con un disparo inverosímil desde 35 metros que se estrelló en el larguero, tuvo cerca el empate que no llegó. H