Puig garantiza la atención sanitaria pese al «estrés» en los hospitales contratiempo
Destaca que aún hay capacidad ante los próximos días, que van a ser «difíciles» Vuelve a reclamar responsabilidad de los ciudadanos para evitar más contagios
Los retrasos en recibir vacunas son «un golpe»
El gran incremento de nuevos casos de coronavirus detectados en Castellón en las últimas semanas incrementa la presión sobre los centros hospitalarios, que a lo largo de esta pandemia han tenido que habilitar nuevas camas para los pacientes más críticos, mientras gente ingresada por otras patologías han sido derivados a centros privados para hacer frente a la situación. El president de la Generalitat, Ximo Puig, reconoció ayer el «estrés» que sufre el sistema sanitario de la Comunitat,
pero aseguró que hay margen de actuación ante lo que venga en las próximas jornadas, además de la atención en otras patologías que son graves o inaplazables.
La atención en los centros está «sobreviviendo por el gran esfuerzo del personal pero también desde la perspectiva de la contención de las infraestructuras». Detalló la «alianza efectiva entre el sector público y privado que permite garantizar 300 camas en críticos», además de hospitales de campaña como el situado junto al General de Castelló. Para las áreas habilitadas junto a los centros de referencia en el conjunto de la Comunitat «300 camas y se podrían extender hasta las 700», aseguró. La situación de las instalaciones sanitarias fue analizada en un encuentro telemático con la consellera de Sanitat, Ana Barceló, y otros cargos de este departamento.
A pesar de que en estos momentos «hay capacidad de absorber» nuevos ingresos, el president volvió a hacer un llamamiento a la ciudadanía ante «los próximos días, que serán difíciles».
Por esta razón hizo $ una reflexión sobre «la necesidad del esfuerzo de la corresponsabilidad personal», por lo que hay que actuar «con máxima prudencia, ya que sin esa voluntad será imposible vencer rápidamente la pandemia». Puig relató que hay estudios que afirman que más del 60% de los contagios «se producen en el ámbito de la máxima confianza, y es ahí donde hay que orientar todo nuestro esfuerzo».
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Ximo Puig anunció que el retraso anunciado por la farmacéutica Pfizer para suministrar vacunas (más información en la página 43) supone «una desgracia y un golpe a la trayectoria que seguimos» en la Comunitat, aunque confió que el ritmo «se recupere en las próximas semanas, si la empresa cumple su palabra». La compañía anunció la necesidad de demorar las entregas por problemas logísticos y de producción, aunque ayer afirmó que este contratiempo se quedará reducido a solo una semana.
Puig destacó que está «garantizada la segunda dosis para los vacunados que ya han recibido la primera», por lo que quienes ya iniciaron este proceso «tendrán ya la inmunidad», como residentes de centros de personas mayores, sus trabajadores y personal del sistema sanitario. Además, «en 15 días se recuperará la velocidad que ya se había implementado», dijo. También recordó que la Comunitat era el territorio de nuestro país con un mejor ritmo en la administración.
Desde el PSPV de Castellón valoraron «el alto porcentaje en los índices de vacunación en la Comunitat superando el 85% de las dosis disponibles a fecha del 14 de enero, lo que hace que sea uno de los territorios con mejor ritmo».