La étnica ‘Adú’ lidera el ránking de nominaciones al Goya con 13
‘La boda de Rosa’, de Bollaín, rodada en Benicàssim, aspira a ocho galardones Málaga y València comparten sede de una atípica entrega de premios de cine
En las nominaciones a los Goya 2021, los que serán recordados como los de la pandemia, están los de siempre y alguno más (suele pasar, pero no deja nunca de sorprender), y especialmente algunos cineastas que se decidieron por la pantalla grande en el 2020 con todas las dificultades del mundo impuestas por el coronavirus. El ránking de filmes con el mayor número de nominaciones está formado por Adú, con 13, Ane y Las niñas, nueve; La boda de Rosa, con ocho; y Sentimental, cinco menciones. Además son las candidatas a mejor película.
El anuncio de las candidaturas fue realizado ayer en la sede de la Academia de Cine por un Dani Rovira y una Ana Belén distópicamente tapados con la mascarilla anticovid de uso obligatorio, y con una semana de retraso por los efectos de la borrasca Filomena.
Pese a que en las apuestas para los Premios Goya 2021 aparecían títulos como El año del descubrimiento, en las categorías mayores, salvo la irrupción indudable de Las niñas, de Pilar Palomero, y Akelarre, de Pablo Agüero, la nomenclatura al final para el premio de los directores es ortodoxa: Isabel Coixet con Nieva en Benidorm (dos nominaciones, pero grandes), y Juanma Bajo Ulloa, que regresa del ostracismo al que se le había condenado, con Baby, que también opta a mejor música original.
EN BENICÀSSIM Les acompañan en $ la categoría de mejor cineasta Iciar Bollaín con La boda de Rosa (el toque castellonense de los Goya 2021, ya que el filme fue rodado en Benicàssim), y Salvador Calvo con Adú. Incluso un habitual de los premios, Fernando Trueba, aparece con su producción colombiana El olvido que seremos, que opta a mejor película iberoamericana
Mientras, más nombres reconocidos en el listado de mejores actores: Javier Cámara, Ernesto Alterio, David Verdaguer y Mario Casas, en su primera nominación con No matarás. En lo del galardón a la mejor actriz, las sorpresas toman rostro con Amaia Aberasturi y Patricia López Arnáiz, habitual secundaria que se echa sobre sus hombros todo el peso de Ane. La veterana Kiti Mánver, quien ganó un Goya en 1991 como secundaria, treinta años después aspira al de mejor protagonista femenina por su trabajo en El inconveniente. Candela Peña, quien tiene todas las de ganar (aunque hacer predicciones en esta feria de los egos es como abrir la caja de Pandora y que salgan rayos y centellas), por La boda de Rosa, completa las cinco actrices que quieren su noche de gloria cinematográfica.
La normalidad en las nominaciones contrasta con el atípico desarrollo de la ceremonia de entrega de premios con dos sedes compartidas: el Teatro del Soho de una Málaga que se ha convertido en una de las ciudades fetiches del cine (y de muchas más cosas en una proyección internacional), como San Sebastián, Cannes, Berlín, Venecia… y València, en el Año Berlanga que conmemora el centenario del director de Plácido, y donde al menos entregarán dos de los galardones en el Palau de les Arts. Madrid se autoexcluye por la pandemia del covid y Filomena.=