El dilema del empresario es más suspensión o despido
El acuerdo nacional para dar continuidad a los ERTE se saldó sin apenas variaciones respecto a la dinámica seguida desde que se puso en marcha este sistema, aunque la patronal CEOE quiso introducir cambios en las condiciones para extinguir contratos. Según la normativa, las empresas que se acogen al paro temporal asumen un compromiso según el cual no pueden proceder a despidos en un plazo de seis meses desde la finalización de la regulación temporal de empleo.
De lo contrario, no solo perderían las bonificaciones en cuotas de la Seguridad Social de los despedidos, sino de toda la empresa en su conjunto. Finalmente, la patronal ha optado por recular en esta pretensión, al menos durante unos meses, a cambio de mejorar algunas exoneraciones. Pese a ello, la CEOE defiende ajustes si las tensiones de liquidez son insalvables.
La presidenta del colegio de Graduados Sociales de Castellón, Amparo Máñez, afirmó que hay empresarios de la provincia que ya verbalizan el dilema «entre volver a los ERTE o reducir plantilla; se trata de aquellos que ya se acogieron a un paro temporal y volvieron a la actividad hace más de seis meses». Al haber transcurrido ese tiempo no se aplicaría la cláusula de salvaguarda. «Sobre todo se da en hostelería, ocio o gimnasios», añadió. En cambio, segmentos más dañados como agencias de viajes no podrían, ya que no han tenido la oportunidad de levantar un ERTE desde marzo.