Votación para echar a la congresista de QAnon
La Cámara de Representantes se disponía ayer a expulsar a la congresista republicana Marjorie Taylor Greene de los dos comités legislativos para los que fue nombrada por su partido. La maniobra responde a las posiciones extremistas de la congresista por Georgia, que ha abrazado toda clase de teorías conspiratorias, muchas de ellas de corte racista, y ha respaldado en las redes sociales el asesinato de los líderes demócratas en el Congreso, como el de Nancy Pelosi.
Al cierre de esta edición, el resultado de esa votación estaba todavía pendiente de finalizar, pero a los demócratas les bastaba con imponer su mayoría en la Cámara legislativa para apartarla de ambos comités.
Greene compareció ayer en el Capitolio para retractarse de algunas de sus posiciones, como su apoyo a las teorías conspiratorias de QAnon (que afirman que políticos demócratas y gentes de izquierdas participan en una red internacional de tráfico sexual de niños y realizan actos pedófilos), su negación de los atentados terroristas del 11-S o esas afirmaciones con las que sostuvo que las masacres escolares de Parkland o Sandy Hook no fueron más que unos montajes. Un ejercicio similar al que hizo un día antes frente al liderazgo de su partido, que decidió mantenerla en los comités de Educación y Presupuestos a pesar de haberla definido como «un cáncer» en el seno de su formación.