Electrificación a la carta
La marca surcoreana actualiza su SUV más vendido y amplía su oferta con nuevos niveles de hibridación
Hyundai acaba de estrenar una completa actualización del Kona, su modelo más vendido el año pasado en el mercado español.
Estrenado en el año 2017, este SUV de corte urbano se convirtió muy pronto en uno de los principales pilares comerciales del fabricante surcoreano, honores que actualmente comparte con el Tucson, que también estrenó hace apenas unas semanas una nueva generación.
Exteriormente, los cambios de estilo son importantes y afectan de forma especial al frontal, que ofrece un aspecto muy renovado y más atractivo. Es más afilado, más deportivo e incluye faros full led. Además, la marca ha querido marcar claras diferencias de diseño entre las versiones de combustión y las eléctricas, ya que estas últimas apuestan por un frontal específico y particularmente vistoso que incluye una nueva toma de carga. La parte trasera, por su parte, también recibe nuevos paragolpes y grupos ópticos, y el resultado general es muy positivo.
El interior sigue esa misma línea e incorpora numerosas soluciones inéditas, como el tablero de instrumentos digital y la gran pantalla táctil central, ambos de 10,25 pulgadas, o el freno de mano eléctrico, que también se suma ahora al equipamiento de serie.
Sin embargo, la característica más destacada de esta nueva familia Kona es la completa oferta de motores disponible. Hyundai ha previsto propulsores de gasolina o diésel, con o sin sistema de hibridación ligera en los dos casos, una motorización full hybrid y las dos propuestas cien por cien eléctricas que ya se venían ofreciendo, con dos niveles de potencia diferentes y dos baterías de distinto tamaño.
Los precios, sin promociones ni ayudas, arrancan en los 22.390 euros, en el caso de las versiones térmicas; el Kona Hybrid está a la venta desde 27.790 euros y el eléctrico, a partir de 35.650 €.