PP pide autocrítica, pero cierra filas con Casado
Admiten los «malos» resultados aunque rechazan rivalizar
El presidente del PP, Pablo Casado, reunirá hoy al comité ejecutivo nacional para analizar los pésimos resultados electorales cosechados en Cataluña y lo hará en el contexto de un dilema que acecha a los populares cada vez que se enfrentan con las urnas: seguir a pies juntillas el modelo Feijóo (el del partido centrista y moderado) o alejarse de ese centro y radicalizar el discurso para evitar que, como en Cataluña, Vox rentabilice el voto más españolista e inconformista.
En teoría, Casado resolvió este dilema en la moción de censura a Pedro Sánchez al escenificar su ruptura con la extrema derecha de Santiago Abascal. El debate, sin embargo, se reabre de nuevo ya que todo el PP, incluido el valenciano, teme la onda expansiva del 14 de febrero.
A 24 horas de que Casado analice la situación delante de los dirigentes de su partido, una reunión en la que estará presente la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, la cúpula regional admite que los resultados son malos y que es el momento de hacer «autocrítica». Eso sí, desde la unidad: «Hay que estar unidos porque entrar en tensión no nos va beneficiar».
Desde Castellón, el presidente provincial del partido, Miguel Barrachina, señaló que el resultado «no es el esperado» y apuntó a la «gran polarización existente» para justificar el auge de Vox. Sin embargo, tildó de «error» levantar barreras «donde no las hay» y abogó también por la unidad.