Momento para el ‘seny’
Los últimos resultados electorales en Cataluña han representado una nueva oportunidad para los y las catalanas de demostrar mediante las urnas, qué políticas quieren. La victoria del PSC, con Salvador Illa a la cabeza, nos deja una nueva esperanza para que se genere el diálogo tan necesario para el pueblo catalán. Son muchos años los que han pasado con un pueblo dividido por la ideología política, que plantea discrepancias entre la continuidad de una autonomía importantísima en el conjunto del estado español, o la vía de la independencia.
Desde que en el año 2006 el PP presentara un recurso ante el Tribunal Constitucional contra el Estatut de Catalunya, el conflicto histórico se ha venido precipitando año tras año. Hay que recordar que ese estatuto de autonomía promovido por el entonces president Pasqual Maragall y el presidente José Luis Rodriguez Zapatero, contó con un amplio debate del que resultó un acuerdo mayoritario en el parlamento del Parque de la Ciudadela.
Desde el punto de vista actual y tras los acontecimientos que se han venido sucediendo los últimos años, es justo decir que seguramente existieron errores y aciertos en su debate y posterior tramitación. Incluso se puede afirmar que ese recurso interpuesto o la sentencia posterior no tienen toda la responsabilidad del conflicto. La realidad es que ese acontecimiento supuso que el conflicto político se trasladara a la sociedad, radicalizando las diferentes posturas.
Los resultados del domingo pasado nos presentan una realidad que no podemos negar. A pesar de los buenos resultados del socialista Salvador Illa, las fuerzas independentistas han obtenido una mayoría. Debemos replantear de nuevo la estrategia y esforzarnos por entender con empatía la decisión del pueblo catalán. Einstein decía que si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo. Cataluña pide acciones claras y decisiones valientes, que desde luego deben abandonar las posturas extremas de la vía unilateral o la de judicializar el conflicto.
Como decía el exministro Illa, en la madrugada del lunes, es momento para el diálogo y el consenso. Es momento de reivindicar a Cataluña como un pueblo con un sentimiento de pertenencia a una cultura propia. Una autonomía moderna y próspera con su propia identidad, importantísima en la realidad actual del estado español.
Estoy convencido que todo conflicto tiene solución, y esa solución pasa ineludiblemente por el diálogo. Como en todo conflicto todos pierden y todos ganan, pero la solución siempre debe ser la que más beneficie al interés general.
Ahora es momento de que por parte de todos los grupos políticos elegidos en las urnas, busquen la constitución de un gobierno estable, pero sobre todo se arremanguen y se retome ese diálogo que nunca se tuvo que perder.
El pueblo catalán no merece continuar con esta situación, su responsabilidad era elegir en las urnas qué futuro quieren para Cataluña, y eso han hecho. Ahora es momento de la política en la que creemos, la del diálogo, el entendimiento y la concordia. Ahora es momento de la política en la que se pierda lo menos posible y ganen todos. Ahora es momento de poner en valor lo que representa Cataluña, con su identidad, su cultura y su realidad para todos y todas. Ahora es momento de pasar de las palabras a los hechos. Ahora es momento para el seny.