El Castellón busca intensidad y efectividad para puntuar en Girona
Juan Carlos Garrido prepara cambios en todas las líneas con el fin de corregir los errores
Hoy se cumplen 163 días desde que arrancó la temporada en LaLiga SmartBank y, por lo tanto, 163 días desde que el CD Castellón sumase la primera y última victoria lejos del Estadio Castalia. El equipo, entonces entrenado por el granadino Óscar Cano, asaltó el campo El Toralín y le encajó la derrota a la Ponferradina. Desde aquel lejano triunfo en tierras del Bierzo no ha vuelto a ganar un partido lejos de casa la escuadra de la capital de la Plana. Y vista la situación clasificatoria de los castellonenses, urge sumar tanto como local y como visitante, lo que pasa es que hablar de Montilivi son palabras mayores. Ahí pocos puntúan ante un rival hecho para jugar en Primera División la próxima temporada.
El equipo albinegro ha tocado fondo, a nivel de clasificación, tras caer el lunes en casa ante el Fuenlabrada. Es colista de la división de plata y más abajo no puede caer, de momento. Así es que a partir de ahí toca remontar el vuelo sin excusas ni nada parecido.
Por delante quedan 17 finales y la de hoy es la primera. Hasta el punto se podría dar por bueno siempre y cuando el próximo sábado se garantizase ganar a Las Palmas en Castalia. Esta tarde se tiene que salir a ganar al campo del Girona, no a especular. Al equipo de Juan Carlos Garrido le urge hacer una machada, ganar a un grande, para recibir una gran dosis de moral y de autoestima.
EL GIRONA NO SE FÍA DEL CASTELLÓN
Los gerundenses de Francisco, hay que reconocerlo, están siendo más regulares en los desplazamientos que cuando actúan en Montilivi. El número de partidos perdidos como local se eleva a cuatro: Ponferradina, Mallorca y Málaga (0-1), así como Leganés (0-2). Y en tres ocasiones no pasó del empate: Las Palmas (11), Rayo Vallecano y Sabadell (0-0).
Los catalanes vencieron en Castalia con un solitario gol anotado por el lateral Enric Franquesa. Fue en pleno desplome de los orelluts, que encajaron la tercera de las seis derrotas consecutivas que llegó a encadenar el Castellón entrenado por el granadino Óscar Cano.
El técnico de la escuadra castellonense, Juan Carlos Garrido, ya avisó tras la derrota ante el Fuenlabrada, que si su equipo no salta al terreno de juego y se muestra muy intenso y a la vez efectivo, pocas victorias conseguirá. No hay que dejar ni
Francisco Rodríguez, técnico del Girona, dijo ayer que el Castellón es «un equipo peligroso que necesita sumar para salir del último puesto» y que «en Segunda no hay rival fácil». Agregó que los albinegros «vendrán a conseguir puntos», y su equipo debe «estar fluido en campo contrario».
Juan Carlos Garrido dejó fuera de la lista a Paolo Fernandes, Marc Castells y René Krhin, así como al lesionado Juanto Ortuño. Viajaron 23.
El Castellón cuenta con dos futbolistas apercibidos de suspensión: Rubén Díez y Eneko Satrústegui.
respirar ni pensar al rival, y a partir de ahí esperar que la suerte, después de tanto tiempo, le vuelva a sonreír a los albinegros.
Para esta cita, el entrenador valenciano del conjunto orellut solo dispone de la baja por lesión del delantero Juanto Ortuño, una vez que se ha podido recuperar al portero Álvaro Campos, que apunta a estar en el banquillo. Y a partir de ahí se esperan cambios en todas las líneas. Jugadores como Rafa Gálvez, Arturo Molina, Carles Salvador y David Cubillas apuntan a empezar el partido desde el banquillo. El que finalmente no podrá debutar de albinegro es el esloveno Rene Krhin. El técnico Juan Carlos Garrido no le citó.
El conjunto rojiblanco entrenado por el preparador almeriense Francisco Rodríguez dispone de toda su artillería pesada para recibir a los castellonenses. Después de varios meses han conseguido recuperar al delantero uruguayo Christian Stuani, veterano artillero que es un seguro de vida para el ataque rojiblanco. La semana pasada ya le hizo un roto al Mirandés con un doblete.
A las 18.15 horas rodará el balón sobre el césped de Montilivi y allí se espera ver a un Castellón intenso y que plante cara al rival.