Esmalglass y Ferro crean Altadia como el líder global en esmaltes
La nueva enseña es uno de los principales proveedores para la industria cerámica La estructura de la organización cuenta con perfiles clave de los dos grupos
El proceso de fusión entre dos de las principales compañías en el sector de fritas, esmaltes, colores y tintas para la industria azulejera, Esmalglass-Itaca-Fritta y la división cerámica de Ferro, ha dado como resultado la creación de una nueva marca, Altadia, que nace como líder mundial en su segmento con una facturación de aproximadamente 800 millones de euros. El cambio de denominación, que agrupa las diferentes enseñas bajo las que operaba el grupo, culmina un año de trámites, desde el anuncio de la operación, a finales del ejercicio 2019.
Ya a principios del año en curso contaron con el visto bueno del Comité Nacional de Mercados y la Competencia (CNMC), que autorizó la unión aunque con una serie de condiciones, referidas a los planes de innovación. El nuevo grupo estará formado por Esmalglass, Itaca y Fritta (EIF) junto con Ferro TCB, Quimicer, Endeka Ceramics, Vetriceramici, SPC Color, Gardenia Química, Zircosil y Oximet. Por parte de Esmalglass, el cierre del 2020 se saldó con una facturación de 417 millones de euros, mientras que FerroTCB acabó el año con 386 millones.
CÚPULA El nuevo equipo directivo estará liderado por los anteriores CEO de EIF, Vicente Bagán y Antonio Blasco. El exvicepresidente mundial de Ferro TCB, Julio García, desempeñará la función de presidente del grupo. «El equipo humano de Altadia, con su dilatada experiencia y alto conocimiento del sector, es uno de los pilares que permitirá liderar de forma diligente el mercado a nivel mundial», señala García. En este sentido, la nueva estructura organizativa de Altadia contará con perfiles clave de ambos grupos, lo que le aportará la experiencia y conocimiento necesarios para liderar con éxito la fusión.
Altadia estará presente en 19 países con 51 sedes distribuidas en 32 plantas productivas y 19 centros de distribución y servicios posventa. «Gracias a esta fusión mejoramos el footprint de todo el grupo con un total de 32 plantas productivas desde las que servir más eficazmente a todos nuestros clientes», indica Vicente Bagán.
Por su parte, Antonio Blasco expresa que el aporte de valor de esta operación radica en «la complementariedad de los equipos humanos, productos, servicios y marcas, presentándonos como una opción más completa para nuestros clientes», dedicados a la industria de los pavimentos y revestimientos cerámicos.