Choque en el PP por el fichaje de Cantó y la lista electoral de Madrid
Ayuso advierte a la dirección de que no pondrá al exdirigente de Cs por delante de sus consejeros El padrón puede ser un revés, pero Génova reconoce que el actor está vinculado a la región
Cuando las encuestas auguran que un partido va a crecer de manera considerable en escaños, hay un suspiro infinito en los despachos. Las predicciones halagüeñas ahorran muchos codazos y malos rollos para elaborar las listas electorales. Pero, como en cualquier regla, siempre hay excepciones, y en Madrid las están experimentando.
Los sondeos señalan que la presidenta, Isabel Díaz Ayuso (PP), puede dar un salto de más de 20 diputados (ahora tiene 30) en las elecciones del 4 de mayo. El martes, sus colaboradores subrayaban a este diario la tranquilidad de que en la lista pudieran seguir «todos lo que han acompañado a la presidenta estos dos años» y «poder añadir muchos más con la seguridad de que van a lograr escaño». Con ese espíritu optimista andaban cuando, el miércoles, llegó una petición desde la sede nacional: Pablo Casado propuso colocar a Toni Cantó (de Ciudadanos hasta hace 10 días) en los puestos de salida.
La dirección nacional detectó reticencias en Ayuso y optó por los hechos consumados. Primero puso en alerta a la prensa: Cantó está reunido con la presidenta en la Puerta del Sol. Dos horas más tarde, fuentes del equipo de Casado anunciaron que el exportavoz de Cs en las Cortes valencianas irá como independiente en la candidatura de Ayuso. La escenificación de la absorción de dirigentes naranjas (después del fichaje también de Fran Hervías) avanzaba. «Entre socialismo y libertad, Cantó apuesta por la libertad y hace más grande nuestra formación», proclamaron esas fuentes.
En cambio, la versión de Ayuso no era tan contundente. Sus colaboradores se limitaron a decir que ellos, y no la presidenta, habían sido los que se habían reunido con Cantó y no confirmaron su inclusión en la lista. El equipo de la dirigente mandó así el mensaje de que es ella quien tiene el control de la lista y no quiere colocar a Cantó por encima de sus consejeros. «Estamos negociándolo y hablándolo, y yo soy amiga de ser muy discreta y también, desde luego, de respaldar a todas las personas que han gestionado bien y han estado conmigo en el grupo parlamentario», declaró ayer Ayuso.
CULTURA, SU AMBICIÓN El miércoles, Casado habló por teléfono con el exdiputado de Cs para rematar su fichaje. El acercamiento de Cantó al partido conservador, según dirigentes naranjas y populares, ya se había iniciado «hace más de un año». Conservadores valencianos sostienen que llegó a hablar con Carlos Mazón (presidente de la Diputación de Alicante) sobre la posibilidad de ser su vicepresidente si el PP, en las elecciones de 2023, conquista el Govern.
Mazón es el hombre de Casado en la Comunitat Valenciana. Otras fuentes conocedoras de esos contactos, en cambio, apuntan que reclamó el departamento de Cultura. Sin embargo, con el hundimiento de Ciudadanos y el empuje de Ximo Puig (PSOE), parece que Cantó ha visto peligrar ese sueño y ha detectado más futuro en el PP y Madrid, donde también se ve, concretan dirigentes conservadores, en Cultura.
Aunque en la capital se ha encontrado el obstáculo sobrevenido del padrón: para asegurarse que podrá concurrir a las elecciones debería estar registrado en Madrid, aunque la ley es ambigua y, según Génova, podrá hacerlo porque tiene vinculación con la región al ser propietario de varias viviendas. Las siete vidas de la serie que protagonizó como actor se le van a quedar cortas. Ayer ya dio cuenta de ello. El actor dijo sentirse «ilusionado» por la «oportunidad» que le brinda el PP en Madrid porque considera «esencial sumar fuerzas» en torno a la presidenta porque «hay peligro real de que gobierne el sanchismo e Iglesias». Hace unos meses, el propio Cantó se refería al PP «máquina de corrupción masiva».
Toni Cantó ÚLTIMO FICHAJE DE AYUSO
«Hay que sumar porque hay peligro real de que gobierne el sanchismo e Iglesias»