Gran Hermano

Toledo Llorens*

Ayer el concejal de Movilidad y Juventud escribía en estas mismas páginas una síntesis de una de sus novelas favoritas, 1984 de Orwell. Explica brevemente en qué consiste el libro, habla «entre otras cosas de la manipulación de la información de algunos políticos para moldear a su gusto la opinión pública». Ahora entiendo porqué es una de sus novelas favoritas, parece que es un alumno aventajado de esas críticas que hace el libro a la clase política.

Pero además, confunde un ejemplo que puso la portavoz del Partido Popular, Begoña Carrasco, sobre que el centro de la ciudad últimamente parece Gran Hermano, pero no el de Orwell sino el programa de televisión con un sin fin de ediciones en todo el mundo, donde un grupo de personas convivían rodeados de cámaras, pero parece que el concejal y por extensión el resto del tripartito, no veían mucho la tele además de estar alejados de los problemas reales de los castellonenses.

El pasado lunes una multitudinaria manifestación en coches recorrió el centro de la ciudad, con comerciantes, hosteleros, autónomos, que en sus coches protestaban a golpe de bocina por la instalación de unas cámaras en las calles del centro sin la debida información y con un claro carácter recaudatorio. Para que los lectores se hagan una idea, en solo 20 días de pruebas se detectaron 48.000 infracciones, lo que supondría 9,6 millones de recaudación para las arcas municipales… un despropósito.

Pero ya no es solo en el comercio y hostelería, que en el peor momento les ponen esta medida. Imaginen que necesitan un fontanero de urgencia, el permiso para acceder esta tardando hasta un mes, por tanto tendrá que pagar 200 euros de multa.

Una medida recaudatoria cómo esta, que te multa preventivamente al contrario que los bolardos, en el peor momento posible que demuestra lo alejado que esta el PSOE de los problemas de los castellonenses.