Gerard Moreno lidera al Villarreal
Triplete del crack ‘groguet’, que marca un golazo y transforma dos penaltis en Granada
Gerard Moreno vale por tres... y por mucho más. Su primer hat-trick como profesional con el Villarreal confirma que el Submarino ya navega a toda máquina (cinco victorias seguidas, entre la competición doméstica y la europea), justo antes del tramo decisivo de la temporada. Incontestable triunfo en el Nuevo Los Cármenes, que aumenta la ventaja de los amarillos con el Granada a los 10 puntos.
Con la perspectiva de unos cuartos de final de la Europa League en el horizonte, Unai Emery no reservó a nadie para Zagreb, a pesar de que Sergio Asenjo, Pau Francisco Torres y el propio Gerard Moreno, tres indiscutibles, habían pasado por problemas físicos en los últimos días. Los tres fueron titulares en un once que, a día de hoy, puede considerarse como el de gala del Submarino, a la espera de que Paco Alcácer recupere su mejor nivel. Si acaso, únicamente la titularidad de Rubén Peña, por delante de Mario Gaspar, supuso la nota discordante, con un Samu Chukwueze penalizado por su reciente periplo con la selección nigeriana.
Casi sin tiempo para que Granada y Villarreal recobrasen las sensaciones de la competición después del último parón FIFA, el VAR entró en acción a beneficio, de nuevo, de un Submarino al que le van devolviendo lo que un día le quitaron. Las manos de Víctor Díaz al cabezazo de Pau fueron tan claras como que el balón iba para fuera, pero Cuadra Fernández, quien incluso se acercó al monitor, señaló el punto fatídico después de tres minutos de suspense al que Gerard Moreno puso fin acertando desde los 11 metros.
El barcelonés, que había hecho el primer remate a puerta del partido, firmó una obra de arte en el 0-2. El movimiento rompió a Gonalons, quien incluso rodó por los suelos, para eludir la salida de Rui Silva. Un golazo, aunque Quini contribuyó remachando la vaselina del catalán en el vano intento por evitar el 0-2 (min. 18).
El Granada, que cuando volvió a parpadear ya perdía con nitidez, reaccionó con tibieza, pero lo suficiente para que Asenjo privara a Roberto Soldado, acto seguido, de meter de nuevo a los suyos en el encuentro. El Villarreal contemporizó a medida que se acercaba al descanso, a partir de la posesión del esférico, que pasó de estar monopolizado por los nazarís a, incluso, decantarse lige
ramente en favor de los amarillos. Pudo crecer la renta, en una contra mal resuelta por Rubén Peña.
Si alguien pensaba en la relajación, Gerard se encargó de disiparla con el cabezazo al palo a los pocos segundos de que el balón rodara de nuevo. El Granada estaba grogui y Víctor Díaz, milagrosamente, evitó el 0-3 de Manu Trigueros, que llegó a la hora del encuentro, en otro penalti cometido por el portero local sobre el talaverano que Gerard Moreno también anotó con seguridad. Emery, entonces sí, empezó a pensar en el jueves, sentando al crack después de una portentosa actuación.
La última media hora sobró, de no ser por la insistencia del Villarreal por hacer el cuarto. Alcácer trabajó afanosamente por aprovechar la coyuntura para saciar su sed con un gol... sin recompensa.
El Granada, a su vez, ya tenía su foco puesto en el Manchester United. Apenas si se asomó a Asenjo e, incluso, desperdició la oportunidad de poner un puntito de emoción a los 10 minutos finales, pero Jorge Molina marró el penalti al ser derribado por Etiene Capoue: lo mandó a las nubes.