Estudian el futuro de las cámaras del centro y el PP pide apagarlas
López defiende que corregirán los errores y agilizarán los trámites
El Acord de Fadrell estudia en este momento el futuro del sistema de accesos al centro de Castelló mediante el reconocimiento de matrículas a través de cámaras tras las quejas de los vecinos.
El portavoz municipal, José Luis López, defendió recientemente que el equipo de gobierno analizará todas las opciones que estén sobre la mesa y evitó descartar ninguna, tampoco su desactivación. Además, López explicó que «se está intentando dar solución a todas las quejas», las cuales «está atendiendo el área de Movilidad con toda la celeridad que se puede» para ofrecer una respuesta a las personas que han planteado problemas o peticiones.
Las denuncias emitidas por error, al tratarse de un sistema automático, también serán «retiradas», corrigiendo así los diferentes errores que se den en cada uno de los casos particulares. «Aquellas multas que se hayan puesto cuando la autorización de acceso esté en vigor o haya cualquier tipo de error se subsanarán», concretó el portavoz municipal, procediendo a devolver el importe de las sanciones asociadas, que ascienden hasta los 200 euros, si ya se hubiera abonado.
RETIRADA La portavoz del Partido Popular en el consistorio, Begoña Carrasco, apoyó la desconexión del control de accesos y comentó que «el tiempo acabará por dar la razón a todos los que llevamos meses pidiendo que se apaguen las cámaras para evitar que el corazón de la ciudad se apague».
A ojos de la concejala popular se trata de «un clamor de la mayoría de castellonenses», que rechaza un sistema «con un único fin recaudatorio en plena época de crisis y que ya han notado en primera persona incluso vecinos que habían renovado su autorización para acceder con sus turismos al centro y les han seguido multando».
Carrasco asegura que también han protestado residentes en el centro, a quienes «no se les ha enviado notificación alguna por parte del gobierno municipal informando previamente del nuevo sistema de cámaras» y que, según la portavoz, «se han visto en la tesitura de tener que pagar hasta 4.000 euros en multas en 20 días, por acceder a su parking», concluye insistiendo en su oposición al nuevo método de vigilancia.