Bebe, una vuelta con ‘Libertad’
La extremeña regresa a la actuación tras una década
María Nieves Rebolledo Vila, conocida como Bebe o Bebe Rebolledo, es la protagonista, junto al actor andorrano Isak Ferriz, de Libertad, drama histórico recientemente estrenado en cines, como largometraje, y en Movistar+, como miniserie. Dirigida por Enrique Urbizu, la ficción narra la lucha de Lucía, la Llanera, que, tras 17 años en prisión y esquivar el garrote vil al ser indultada, intenta vivir en libertad con su hijo Juan (Jason Fernández). No será fácil, pues bandoleros, los hombres del gobernador y su exmarido la buscan, convirtiendo Libertad en un wéstern de odios y venganzas en la España del siglo XIX.
Esta producción significa el regreso a la interpretación de la artista extremeña tras un paréntesis de una década, después de protagonizar con Marko Mihailovic el cortometraje Atardecer rojo, del cineasta Álex Pachón. Para la cantante y actriz la oportunidad de participar en esta historia de personajes fuera de la ley ha sido «todo un regalo». Una experiencia que le ha permitido conocer lugares increíbles y disfrutar de un rodaje al aire libre, con animales, con frío y lluvia, mucha lluvia, y que terminó justo unos días antes de que se declarara el estado de alarma por el covid.
En declaraciones al portal Vertele, Bebe no dudó en describir la dirección de Urbizu como «determinante». «Cuando alguien lo tiene tan claro, te dejas llevar. Y Enrique tiene claro lo que quiere ver, así que tú lo que tienes que hacer es dejarte de chorradas y comeduras de tarro y hacer simplemente lo que diga el jefe», afirmó sobre el director bilbaíno.
Nacida en Valencia en 1978, pero criada en Zafra (Extremadura), esta cantante y actriz de 42 años y madre de una niña creció en una familia en la que la música era esencial; no en vano sus padres formaban parte del grupo folk Suberina. En 1995, una adolescente Bebe instalada ya en Mérida debutó como corista con un grupo local, iniciando de esta manera una carrera artística que comenzó a cimentarse un año después cuando marchó a Madrid para estudiar arte dramático. En la capital española, Bebe compaginó sus estudios dramáticos con actuaciones musicales, siendo el 2001 un punto de inflexión en su trayectoria, al ganar un concurso de cantautores en Extremadura.
Tras varios años de formación y muchos meses de castings, su debut en la interpretación llegó en el 2003 al conseguir papeles secundarios en los filmes Al sur de Granada, de Fernando Colomo, y El oro de Moscú, de Jesús Bonilla, y en uno de los capítulos de la serie El comisario (Telecinco). Aunque Bebe intentó compaginar la faceta artística con la musical, es a través de la música como finalmente consiguió el reconocimiento al publicar en el 2004 su primer trabajo discográfico, Pafuera telarañas. Un disco producido por Carlos Jean en el que destacan las canciones Ella, Siempre me quedará y Malo, en las que denuncia la violencia de género, y Que nadie me levante la voz, para la serie Aída (Telecinco).
Pero tras el fulgurante éxito de su debut musical –Premio Ondas 2004 y Grammy Latino 2005–, en el 2006 Bebe anunció su retirada temporal de la música para centrarse en su faceta de actriz.
La decisión le permitió participar en dos importantes proyecto cinematográficos: La educación de las hadas (2006), de José Luis Cuerda, y Caótica Ana (2007), dirigida por Julio Medem. Su excelente papel en el filme de Cuerda la llevó a ser nominada en la categoría de mejor actriz revelación en los Goya, pero ganó el premio a la mejor canción original con Tiempo pequeño, en la banda sonora del filme.
La cantante volvió a la producción musical en el 2009 con su segundo disco Y, al que le siguieron Un pokito de rocanrol (2012), nominado en los Grammy como mejor disco latino, y Cambio de piel (2016), hasta la fecha su último trabajo.
Siempre comprometida, defensora de los derechos de la mujer y reivindicativa, Bebe logró crear jurisprudencia cuando en el 2019 demandó a su primera discográfica por cláusulas abusivas. La sentencia supuso todo un hito en este sentido en España.
El reconocimiento
le llegó en el 2003 con los papeles en ‘Al sur de Granada’ y ‘El oro de Moscú’
Fue nominada a
actriz revelación pero ganó el Goya a mejor canción original por ‘Tiempo pequeño’