La UE eleva el tono con Rusia por Navalni y la tensión de Ucrania
Josep Borrell culpa a Moscú de la salud del dirigente opositor Denuncia el despliegue de tropas rusas en la frontera
A. González Laya
MINISTRA DE EXTERIORES DE ESPAÑA
«No deseamos conflicto con Rusia. Pero también seremos firmes, con líneas rojas»
El estado de salud de Alexei Navalni se deteriora y Rusia debe garantizar el acceso del líder opositor a cuidados sanitarios adecuados y médicos profesionales de su confianza. Es el mensaje que trasladó ayer el alto representante para la política exterior de la UE, Josep Borrell, antes y después de la reunión virtual de ministros de Exteriores de la UE que puso de manifiesto la preocupación con la que siguen los Veintisiete tanto el despliegue de tropas rusas en la frontera con Ucrania como el caso Navalni. «Estamos muy preocupados por su salud. Las autoridades rusas tienen que darle los cuidados sanitarios que necesita. Son responsables de su salud», recordó.
Aunque Navalni fue trasladado ayer al hospital de una prisión, el jefe de la diplomacia europea insistió en que el líder opositor debe tener «acceso inmediato a profesionales médicos de su confianza». Una demanda que ya cursó durante su humillante viaje a Moscú en febrero pasado pero que no fue escuchada. «Ahora la situación se está deteriorando y hacemos responsables a las autoridades rusas de la situación sanitaria del señor Navalni», avisó.
Navalni, encarcelado el pasado 2 de febrero en Rusia tras ser condenado a cumplir tres años y medio de prisión por incumplir los términos de su libertad condicional, empezó una huelga de hambre a finales de marzo en protesta por el tratamiento que recibía de las autoridades de la prisión. «Exijo que me permitan ver al médico. Mientras eso no suceda me declaro en huelga de hambre», dijo entonces a través de un carta publicada por sus colaboradores.
Su envenenamiento e intento de asesinato fue en octubre pasado el motivo por el que la UE impuso sanciones contra seis dirigentes y una entidad rusa.
TROPAS RUSAS No es el único frente en retroceso que preocupa a los Veintisiete. El jefe de la diplomacia europea volvió a denunciar el despliegue de tropas rusas en la frontera con Ucrania. Según las cifras de referencia que maneja Borrell, hay 150.000 soldados rusos concentrados lo que supone «un riesgo de escalada evidente». «Es una situación muy peligrosa y hacemos un llamamiento a Rusia para que retire sus tropas de la frontera», explicó tras una reunión en la que también escucharon el análisis de la situación del ministro ucraniano, Dmytro Kuleba, a quien mostraron a su vez el pleno apoyo de la UE a la integridad territorial de Ucrania y el rechazo a la anexión ilegal de Crimea.
«Nuestro deseo es evitar una escalada. No deseamos conflicto con el vecino ruso. Haremos lo posible para evitarlo pero también seremos firmes, con líneas rojas, que son la integridad territorial y soberanía de Ucrania sobre la cual coincidimos todos, la UE y la OTAN. Es una línea roja que no deseamos que se traspase», avisó la titular de Exteriores española.
En medio de estas tensiones, el Kremlin informó de que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, participará en la cumbre del clima convocada por Joe Biden, que comenzará este jueves.