Movilización para conservar la fachada del IES Botànic
La Associació Arqueològica pide que no la derriben por su «relevancia histórica»
La Associació Arqueològica de la Vall d’Uixó ha solicitado por escrito al Ayuntamiento que descarte el derribo de la fachada del IES Botànic Cavanilles en el proyecto de reforma del centro, y ha iniciado una campaña de difusión a través de las redes sociales de su iniciativa para recabar más apoyos.
La movilización vecinal comenzó cuando la Concejalía de Educación hizo público a través de Mediterráneo su intención de demoler completo el edificio central del instituto para plantear una nueva construcción más moderna y adaptada a un modelo educativo de innovación. Entre otras cosas, porque los técnicos municipales restaron cualquier tipo de valor arquitectónico y patrimonial a la fachada, pues inicialmente lo que pensaban era mantenerla y solo demoler la parte interior. Sin embargo, no han sido pocas las personas que han mostrado a título individual su rechazo, argumentando que se trata del centro de Secundaria más antiguo y que su imagen está vinculada al pasado reciente de la ciudad.
Lo que solo eran opiniones personales compartidas a través de las redes se ha convertido en una protesta y propuesta formal de una agrupación de referencia en el municipio, por lo que respecta a la defensa y protección del patrimonio de la Vall d’Uixó.
En sus argumentaciones en defensa de la conservación, recuerdan que «la primera denominación de este edificio fue Instituto Laboral y fue construido en 1951 siendo obra del arquitecto castellonense Vicente Traver Tomás».
Entre los valores que destacan de la construcción, y que justificarían que no se desapareciera, indican precisamente la autoría, pues Traver «fue un arquitecto histórico con fama y reconocimiento de ámbito nacional».
En cuanto a las características de la fachada, destacan el estilo distilo in antis (dos columnas situadas entre dos pilastras que se levantan a ambos lados), y también «los adornos de las molduras y las dos calles que flanquean la entrada, realizados con ladrillo caravista rojizo». Para la Associació Arqueològica, aunque no tenga valor arquitectónico «sí que lo tiene histórico», calificándolo como un «edificio que es emblemático y que convendría preservar».