15-M, ¿sí se pudo?
Se cumple una década después de aquellas protestas que llenaron las calles Repasamos los logros y fracasos de los ‘indignados’ a través de sus pancartas
Podemos se forjó como heredero de las plazas en la política
La crisis socioeconómica de 2008, la corrupción, las desigualdades y los recortes provocaron una ola de indignación social en España. Hace una década, el 15 de mayo de 2011, miles de personas se concentraron en 50 ciudades para exigir que se revirtiera la precariedad bajo el lema Democracia Real Ya. Algunas de estas protestas derivaron en acampadas espontáneas que se alargaron durante más de un mes pese a las citas electorales, las intervenciones policiales y las advertencias judiciales.
Los indignados tomaron el micrófono para alzar la voz. Pero pese a la movilización histórica del 15-M, el bipartidismo salió ileso en las urnas con el PP a la cabeza.
El 22 de mayo de 2011, el PP arrasó en las elecciones municipales y autonómicas y el PSOE cosechó una derrota histórica. Los populares recabaron 6,6 millones de votos (37,34%), frente a los 4,9 millones de papeletas socialistas (27,84%). El PP ganó en 11 de las 13 comunidades autónomas llamadas a las urnas y obtuvo mayoría absoluta en 3.304 municipios, mientras que el PSOE hizo lo propio en 1.858 localidades.
ELECCIONES GENERALES Seis meses después, el 20 de noviembre de 2011, se renovaron los 350 escaños en el Congreso. El vencedor de las generales fue el PP de Mariano Rajoy, que logró una holgada mayoría absoluta, con 186 escaños (32 más que en 2008). El PSOE se hundió hasta los 110 escaños (59 menos que en los comicios anteriores). La participación en las generales cayó cinco puntos de 2008 a 2011, del 73,85% al 68,94%.
Cuando se levantaron las acampadas, el legado del 15-M se quedó en los barrios de las grandes ciudades y en los municipios a través del relanzamiento de asambleas vecinales y de movimientos sectoriales como las mareas en defensa de los servicios públicos y contra las privatizaciones.
En las instituciones, Podemos se forjó como heredero de las plazas para sacudir el panorama político español. Al grito de «Sí se puede», los morados irrumpieron en 2014 en el Parlamento Europeo, consolidaron sus círculos hasta su entrada en el Congreso de los Diputados en 2015 y pactaron con el PSOE compartir el actual Ejecutivo de coalición. Uno de sus ideólogos, Pablo Iglesias, fortificó su liderazgo hasta la vicepresidencia del Gobierno de Pedro Sánchez, pero su apuesta por dar la batalla madrileña contra el PP y la candidatura de Isabel Díaz Ayuso forzó su abandono de la política la noche del pasado 4 de mayo.
Diez años después de su nacimiento analizamos el 15-M a través de las reivindicaciones que lucieron los indignados en sus pancartas para comprobar cuál ha sido el recorrido de sus demandas y responder: ¿Sí se pudo?