El paro sube en 1.100 personas en el inicio de año pese a la remontada de la industria
Este sector tira del empleo, aunque todavía ocupa a 10.700 personas menos que hace un año
Agricultura y servicios pierden ocupados por el fin de las campañas de Navidad y citrícola
El mercado laboral sigue mandando mensajes contradictorios. Durante el primer trimestre de este año se crearon en Castellón 1.500 empleos y la cifra de personas que trabaja alcanzó las 239.100, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Sin embargo, hay otro dato que da el contrapunto: el paro aumentó en 1.100 personas, lo que se tradujo en un ligera subida de la tasa de desempleo, que se sitúa en el 13,4%, casi dos puntos más que en junio del 2022.
Esta doble circunstancia (hay más personas trabajando, pero también más demandantes de empleo) y que, aparentemente resulta una paradoja, tiene una clara explicación: el repunte de la población activa, que en Castellón aumentó en 2.600 personas en el primer trimestre, hasta las 277.500. Además, en el último año, la población activa ha crecido en 7.700 personas y los datos divulgados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan que el mercado laboral no ha sido capaz de absorber la demanda de todas las personas dispuestas a trabajar y que en los últimos meses se han incorporado al mercado laboral, bien porque han llegado de otros países o porque, ante una mayor expectativa de encontrar un empleo, han pasado activamente a buscarlo.
La estadística muestra que el aumento de parados no es sinónimo de frenazo en el empleo y en Castellón el sector que más puestos de trabajo creó en el primer trimestre fue la industria. Pese a que el azulejo, la principal rama industrial en la provincia todavía sigue muy tocado por los sobrecostes del gas y la falta de ayudas públicas, el sector secundario ganó 3.700 trabajadores en los tres primeros meses del año y ocupa a 45.600 personas. La parte menos buena, y que evidencia el impacto de la crisis, es que se está todavía muy lejos de la cifra alcanzada hace un año, cuando los trabajadores de la industria eran 56.300.
EL CAMPO PIERDE FUELLE La industria tira del empleo en Castellón y otra actividad que va como un tiro es la construcción. Los ocupados en el ladrillo ya son 16.800, mientras que se compara con un año antes el ascenso es de 2.200 trabajadores. Al otro lado de la balanza, en cambio, se sitúan la agricultura y el todopoderoso sector servicios. La primera perdió 2.000 ocupados en Castellón durante el primer trimestre (la campaña citrícola, que esta temporada ha sido una de las más cortas de la historia, explica este descenso), mientras que actividades como la hostelería, el comercio o los servicios profesionales ocupan a 300 personas menos que al cierre de 2022.
En su valoración de los datos, el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, subrayó que el aumento del desempleo reflejan el fin de las campañas de Navidad y agrícolas. «Son cifras moderadamente negativos que llegan en un contexto de máximos históricos de empleo y que están influidos por las variaciones estacionales», indicó.
La patronal valenciana CEV realizó una «valoración negativa» de los datos de la EPA, al tiempo que insistió en que es «urgente» apoyar a las empresas más lastradas por los altos costes energético. Por su parte, los sindicatos UGT y CCOO hicieron hincapié en que el empleo destruido es temporal y reclamaron políticas feministas, ya que son las mujeres las más afectadas por el alza del paro.