Arranca la reparación del parqué y la cubierta del CTD de Vila-real
Los trabajos contemplan en primer lugar arreglar el techo que se derrumbó en septiembre del 2021 El SME apuesta por acelerar las obras y reabrir el pabellón para el inicio de la temporada en octubre
Los trabajos para reparar la parte de la cubierta del pabellón del centro de tecnificación deportiva (CTD) de Vila-real que se derrumbó en septiembre del 2021, así como para sustituir el parqué que quedó gravemente dañado por la entrada de agua, arrancaron ayer. Fue con las primeras labores de colocación de los andamios, que servirán para dejar en condiciones óptimas un recinto que cerraron en abril del 2021 con el objetivo de evitar daños a las personas, dado el deterioro que presentaba el techo y que originaba filtraciones y goteras en todo el polideportivo.
Según ha podido saber Mediterráneo, tras la colocación de los andamios procederán a retirar las láminas de madera del suelo, lo que permitirá acceder a la maquinaria pesada al interior del recinto deportivo para acometer las labores de arreglo de la cubierta. El propósito no es otro que culminar el techo antes de iniciar la sustitución del pavimento del pabellón, evitando así la entrada de agua que, en caso de lluvia, podría complicar la intervención.
El calendario de ejecución de las tareas, en principio, es de siete meses, de manera que la previsión que manejan es que el polideportivo del centro de tecnificación pueda volver a abrir sus puertas en noviembre. Con todo, y como ya señaló a este rotativo el concejal de Deportes de Vila-real, Javier Serralvo, la intención es acelerar las obras al máximo para adelantar plazos, aunque todo dependerá de los problemas añadidos que puedan detectar en la cubierta.
GUIA ESPORTIVA // Desde el Servei Municipal d’Esports trabajan en dos hipótesis a la hora de elaborar la programación deportiva para la próxima campaña 2023-2024. Todo apunta a que en la planificación incluirán el polideportivo del CTD en la Guia Esportiva, aunque en los dos primeros meses no se pueda utilizar para el entrenamiento de los dos equipos que hacían uso del recinto antes de tener que cerrarlo, «para evitar males mayores», según indicó en su día el concejal Javier Serralvo.
La Conselleria de Educación, Cultura y Deporte adjudicó esta intervención a la empresa castellonense Becsa, por un importe de 1,1 millones de euros, lo que supone una rebaja sobre el precio de licitación de un 27%, con un ahorro que alcanza los 423.000 euros.
A preguntas de este periódico, el edil Serralvo muestra su satisfacción por el inicio de las labores para reparar los daños que se produjeron en septiembre del 2021, «con la mirada puesta en volver a contar con cinco pabellones».