La Fe implanta el primer marcapasos en Europa a un bebé prematuro
El equipo médico ha tenido que adaptar el dispositivo más pequeño que hay en el mercado
Traen el aparato de EEUU tras recibir la autorización para implantárselo al niño
La Unidad de Arritmias, junto con los servicios de Cardiología Pediátrica y Cirugía Cardíaca del Hospital La Fe de València, ha implantado con éxito un marcapasos sin cables habilitado para el uso en niños, a un neonato de bajo peso. Se trata de la primera vez que esta intervención en un bebé prematuro se lleva a cabo con éxito.
El bebé, que cuenta apenas con un kilo y medio de peso, presentaba un bloqueo auriculoventricular congénito completo, un hecho que, según explicó el jefe de sección de la Unidad de Arritmias del Hospital La Fe, Joaquín Osca, le provocaba «una bradicardia severa» que ponía al menor en una situación de riesgo vital, según informaron ayer fuentes de la Generalitat valenciana.
La presencia del bloqueo cardíaco, precisó también Osca, «obliga al implante de un marcapasos con el fin de poder garantizar una frecuencia cardíaca adecuada a las necesidades del paciente». El implante de un marcapasos en edad neonatal se realiza a través de un acceso quirúrgico, ya que el implante percutáneo, el normal en adultos, no es posible.
De hecho, los marcapasos que se encuentran disponibles en la actualidad están diseñados para su uso en adultos, por lo que su tamaño es grande para un neonato.
ADAPTAR EL MÁS PEQUEÑO Por este motivo, el marcapasos que se ha implantado al bebé es una adaptación del marcapasos más pequeño existente: el marcapasos micra, un marcapasos miniaturizado que se implanta dentro de la cavidad cardíaca en adultos.
En neonatos «no se puede implantar este tipo de marcapasos en el interior de una cavidad cardiaca, por su tamaño, por eso necesita de un cable epicárdico, que es lo que normalmente se utiliza en este tipo de paciente», explicó al respecto el especialista.
Por dicho motivo, se ha realizado una modificación en el diseño original para poderlo usar al mismo tiempo que el cable, que se implanta en el bebé mediante la ejecución de un acceso quirúrgico.
Al haber existido una modificación, el utilizar este dispositivo en el pequeño ha requerido la autorización de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps) que, tras haber analizado las distintas opciones disponibles, autorizó su implante como uso compasivo.
Dicha autorización, añadieron las fuentes consultadas, ha permitido el traslado del marcapasos desde los Estados Unidos.