Buscaban dinero en Marie Claire y solo robaron un móvil
La Guardia Civil analiza cámaras y busca huellas de los cinco encapuchados
La Policía Judicial se ha hecho ya cargo de la investigación del asalto a la empresa textil Marie Claire que tuvo lugar en la noche del sábado al domingo, como adelantó ayer Mediterráneo. Aunque inicialmente el caso se lo quedaron efectivos de la Guardia Civil de Morella, al operativo se han sumado ya agentes de Vinaròs y de Vilafranca para intentar identificar y localizar a los cinco encapuchados que entraron en la compañía y maniataron al vigilante de seguridad. Los efectivos analizan las cámaras instaladas en el lugar y también buscan huellas u otros vestigios que pudieran identificar a los asaltantes que, según ha podido saber este periódico, solo buscaban dinero en efectivo. De ahí que no se llevaran absolutamente nada de la fábrica. Únicamente se apoderaron de un teléfono móvil.
DETENCIÓN ILEGAL Y ROBO Pese al escaso botín obtenido, los cargos a los que se enfrentan los cinco fugitivos son graves, pues al robo con fuerza hay que sumar el delito de detención ilegal por la inmovilización y retención del trabajador y que está castigado con penas de cuatro a seis años en el Código Penal. Tras marcharse los cacos, el vigilante pudo liberarse y avisó a la dirección de la compañía, que estuvo trabajando hasta el mediodía del domingo para restablecer la normalidad junto a los cuerpos de seguridad del estado.
Por el momento no se han producido detenciones, como confirmaron ayer a este diario desde la Comandancia de la Guardia Civil.
El asalto en Marie Claire tiene lugar justo unos días después de que este diario se hiciera eco de la delicada situación financiera que sufre esta mercantil y que haya provocado que la inmensa mayoría de su plantilla esté inmersa en el enésimo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).
Y es que, en estos momentos, de las 230 personas que componen la plantilla solo estarían trabajando unas 80, a pesar de las continuas ayudas públicas que ha recibido esta compañía, que llegó a superar los 900 asalariados en su época de bonanza.