Tina Turner fallece tras una larga enfermedad a los 83 años
Su mejor etapa fue en los 80, cuando alcanzó el estrellato y llenó estadios
Tina Turner falleció ayer a los 83 años en su casa de Küsnacht, cerca de Zúrich (Suiza), tras sufrir una larga enfermedad, según informó en un comunicado el portavoz de la familia. Alejada del foco mediático durante estos últimos años, la artista ha permanecido en el imaginario colectivo por sus enérgicas interpretaciones, tanto en grabaciones como en directo. Fue en el año 2000 cuando anunció su retirada a los 61 años, pero sin embargo en 2004 volvió con el recopilatorio All the best, y en 2008, con una gran gira por sus 50 años de trayectoria musical que concluyó en mayo de 2009 en Sheffield. Desde entonces, sus seguidores tuvieron que conformarse con su legado y con recopilatorios como Love songs, editado en 2014.
Pero detrás de esta gran estrella, que entró en 1991 en el Salón de la Fama del Rock and Roll y que en 2018 recibió el Grammy honorífico Lifetime Achievement Award, hay una vida muy compleja con momentos de gran éxito, pero también algunos tormentosos.
El comienzo de la incendiaria versión de Proud Mary que hicieron Tina Turner y su violento esposo Ike Turner puede resumir los inicios de su carrera: «Nunca hacemos algo agradable y fácil, siempre lo hacemos agradable y duro».
Descubierta cuando era una adolescente por Ike Turner, pionero del rock and roll, la cantante demostró ser un huracán ante el micrófono y se convirtió en los años 60 en todo un icono del soul y el rhythm and blues más apasionado, desbordante y sexual.
CIMA EN LOS AÑOS 80 La parte más reconfortante llegó en los años 80, cuando ya en solitario --tras separarse de su marido-- alcanzó el estrellato mundial llenando estadios. A esa época pertenecen éxitos descomunales, que siguen sonando hoy, como The Best o What’s Love Got to Do With It, y discos como Private Dancer (1984).
También dejó huella en el cine, aunque fuera de forma puntual, en películas como Tommy (1975), cinta basada en la ópera rock de The Who; la postapocalíptica Mad Max Beyond Thunderdome (1985) con Mel Gibson al frente, o la parodia del cine de acción Last Action Hero » (1993) con Arnold Schwarzenegger como protagonista.