El palacio de les Aules acoge la prórroga de la trifulca en Les Corts

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La intensidad política en Les Corts subió enteros con los debates sobre leyes presentadas por el Consell. Sus ecos resonaron en Les Aules. El PSPV presentó una moción contra la normativa de elección lingüística en los centros educativos, al considerar que supone «un veto al valenciano en las escuelas». La medida fue rechazada por el voto en contra del PP y Vox. El popular Alejandro Clausell afirmó que con la nueva norma «la diferencia entre castellano y valenciano en las aulas será menor del 20%». Diputado que, por cierto, causó cierta tensión al inicio de la sesión, por un ligero retraso al llegar.

También los socialistas presentaron una moción crítica con la Ley de Concordia, y otra en la que se exigen medidas para garantizar el derecho a la vivienda. En los dos casos fueron rechazadas por el voto en contra de los populares y Vox. Por su parte, el PP presentó una moción en la que se exigía que el Gobierno central presente unos presupuestos del Estado para este año. «Tenemos unas cuentas prorrogadas del 2023 que suponían un recorte del 14% para Castellón», dijo Folgado.

También hubo una retirada de un punto a iniciativa de Compromís, en la que se solicitaba el apoyo a los ayuntamientos afectados por los megaproyectos energéticos. El PP planteó una enmienda a la totalidad, y para evitarlo, el portavoz de la formación valencianista, David Guardiola, anunció su supresión. Pese a ello, la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina, recordó que la junta de gobierno ha aprobado una línea de ayudas.

Los momentos de mayor distensión ocurrieron con la entrega de un libro a los diputados, con motivo del 23 de abril, y el afecto recibido por el socialista Vicent Aparisi, recién recuperado de un problema de salud. Barrachina se felicitó por su recuperación, y Aparisi dio las gracias a la sanidad pública y elogió el interés de sus compañeros. Al menos en esto sí hubo una concordia plena.