Muere el visionario de Microsoft
Fue el hombre de las ideas en Microsoft, uno de los primeros visionarios en entender que el mundo moderno se gestionaría a través de una pantalla, una mente en constante ebullición que, tras sentar las bases para la proliferación de los ordenadores personales, dedicó parte de su fortuna al avance de la ciencia, las artes y la ciudad donde había nacido: Seattle. Paul Allen murió el lunes a los 65 años por un cáncer del sistema linfático, una enfermedad con la que llevaba lidiando desde 1983. Allen era dueño de los Portland Trail Blazers de la NBA y los Seattle Seahawks de la NFL. Esa pasión por el deporte la combinó con el amor hacia la música. Su colección de objetos de la historia del rock se exhiben en el Museo de la Cultura Pop de Seattle.
Allen fue despedido como un pionero de la industria informática y un personaje clave en la transformación cultural de Seattle. «Paul fue un amigo querido y un verdadero socio. Sin él, los ordenadores personales no hubieran existido», dijo Bill Gates, el hombre que fundó Microsoft mano a mano con Allen en 1975, después de que se conocieran en un colegio privado de la capital económica del estado de Washington. Juntos idearon el sistema operativo MS-DOS y sentaron las bases de Windows, dos hitos que revolucionaron la industria informática. A lo largo de su vida donó más de 2.000 millones de dólares a organizaciones dedicadas a la promoción de la ciencia, la tecnología o la educación. Deja una fortuna de 26.000 millones.
Paul Allen, el cofundador y filántropo de Seattle, fallece a los 65 años por un cáncer