EL DOLCE FAR NIENTE
Muy alejada del concepto “casita de piscina diseñada como vestidor”, esta de líneas limpias y corte racionalista, ubicada en Hawái, está pensada para el disfrute en su máxima expresión. Comer, beber, relajarse... son algunos de los placeres que promete al borde del agua. Refinamento y lujo discreto son sus señas de identidad. Y así, nos conquista.